La adecuación de la producción de coches a la demanda en la actual crisis económica, la caída de las ventas, los ajustes en los concesionarios y puntos de venta (en 65% en números rojos).... La crisis que vive el motor, pese a las ayudas públicas del Gobierno que incentivan la compra de los vehículos nuevos, están dejando una cifra: 9.981 trabajadores de la industria automovilística se vieron afectados por ERE de distinto tipo entre los pasados meses de enero y mayo.
Pese a ser una cifra astronómica, hay que decir que representa un descenso del 28% en relación con el mismo período del ejercicio precedente.
Como es habitual, el mayor número de afectados correspondió a los expedientes con medidas de suspensión (ERE temporales), con un total de 9.570 empleados contabilizados entre enero y mayo, un 26% menos. En mayo, los trabajadores incluidos en estos expedientes se redujeron a la mitad, con 1.095 efectivos.
Por su parte, los expedientes con medidas de reducción de jornada afectaron a 348 trabajadores en los cinco primeros meses de 2013, con una disminución del 29% en comparación con el mismo período del ejercicio anterior.
Un total de 164 trabajadores de la industria del automóvil se vieron afectados por expedientes de regulación de empleo con medidas de extinción (despidos colectivos) en los cinco primeros meses del año, lo que supone un fuerte descenso del 67% respecto al mismo período de 2012.
Durante el pasado mes de mayo, el número de empleados de la automoción afectados por procesos de despidos colectivos se redujeron a menos de la mitad, al pasar de 135 a 62 personas, según datos del Ministerio de Empleo.
