Los avances de la tecnología en la industria de la automoción no solo mejoran la manera de conducir y la seguridad al volante. También crean habitáculos más modernos y confortables, con menos ruido visual y un diseño más cuidado y sobre todo estético.
Precisamente, en búsqueda de esta estética, casi todos los fabricantes están empezando a seguir en el diseño de los interiores de los coches la sustitución de los botones físicos por botones digitales que accionen funciones del coche como puede ser por ejemplo el aire acondicionado.
Suelen estar en el salpicadero del vehículo o directamente integrados en la pantalla que trae incorporada el turismo. Son pulsadores táctiles que se activan y seleccionan con los dedos, como se hace en la pantalla de un ‘smartphone’. Si bien es cierto que, sobre todo estéticamente, estas nuevas tecnologías mejoran la calidad de los vehículos, podrían no ser del todo seguras, tal y como ha contado el diario británico The Times. Y es que la organización de pruebas de seguridad de vehículos se ha mostrado contraria al uso indiscriminado de estos botones digitales.
Los botones digitales podría tener los días contados
EuroNCAP ha avisado que de cara a las próximas pruebas del 2026 penalizará a los fabricantes que mantengan los botones digitales para activar ciertas funciones del coche. Estas serían por ejemplo el aire acondicionado -ya mencionado-, los intermitentes de emergencia o el limpiaparabrisas. Aquellos fabricantes que en 2026 sigan utilizando comandos digitales para utilizar estas funciones no conseguirán las cinco estrellas en los test de seguridad.
En el análisis del periódico británico apunta a ciertos fabricantes. Mercedes, Tesla o Volkswagen serían los tres que más habrían eliminado los botones físicos de su habitáculo, favoreciendo los mandos digitales integrados en pantallas. Los expertos de EuroNCAP explican que este tipo de botones distraen más a los conductores obligándoles a apartar los ojos de la carretera durante más tiempo, poniendo en riesgo su seguridad y la de terceros.
Por ende, a partir del próximo 2026, los fabricantes que quieran conseguir cinco estrellas deberán sacar los botones digitales y transformarlos de vuelta a un formato físico