La llegada del nuevo Clarity Fuel Cell a Europa es clave en la «visión eléctrica» de la movilidad de Honda. La estrategia, que anunció el Presidente de Honda Motor Europe, Katsushi Inoue, en el pasado Salón del Automóvil de Ginebra, tiene un objetivo muy claro para 2025: que dos tercios de los coches vendidos en Europa incorporen motores eléctricos.
El Clarity Fuel Cell es, por tanto, la apuesta de Honda para en materia de movilidad sostenible, una berlina en la línea del también nuevo Toyota Mirai que, con un motor eléctrico, genera la electricidad a partir del hidrógeno almacenado, ahora, en dos depósitos, con capacidad para 141 litros y a una presión de 70 MPa. El principal, de 117 litros, se ubica bajo el compartimento del equipaje y el otro, de 24 litros, debajo de los asientos traseros. Los dos depósitos de hidrógeno se han colocado tan adelantados y bajos como ha sido posible para permitir un maletero de suficiente capacidad como para albergar hasta tres bolsas de palos de golf.
¿Y la seguridad en el almacenamiento?
La tecnología de dispersión y prevención de fugas de hidrógeno de Honda proporciona un nivel excelente de seguridad. Los sensores repartidos por todo el vehículo supervisan constantemente el conjunto motriz para prever potenciales inconsistencias en el suministro de hidrógeno. Si se detecta alguna fuga, el sistema se puede cerrar para evitar escapes de gas, al tiempo que unos conductos permiten la descarga y dispersión seguras del hidrógeno fugado. El sistema permite también que el hidrógeno se libere de forma segura en caso de incendio del vehículo.
El Clarity mide 4,91 metros de longitud, 1,88 de anchura y 1,48 de altura y tiene un interior de cinco plazas. La pila de combustible, el motor eléctrico y la unidad de control se ubican bajo el capó delantero, una disposición de los elementos inspirada en el principio de Honda de dar prioridad a las personas frente a la máquina. Al minimizar el espacio utilizado por el conjunto propulsor, Honda ha sido capaz de conseguir un espacio interior en el que caben cinco adultos, como cabría esperar en el caso de un modelo de cuatro puertas propulsado por un motor convencional. El tamaño de la pila de combustible y de la unidad de generación de energía se ha reducido a un tamaño comparable al de un motor de seis cilindros.
A pesar del tamaño compacto del conjunto propulsor de la pila de combustible, gracias a las tecnologías avanzadas de Honda, ha sido posible garantizar un elevado rendimiento. Los separadores de los canales de flujo originales de Honda son más avanzados de lo que lo han sido nunca, y las celdas ofrecen ahora una mayor eficiencia y tienen una morfología más estilizada al haberse reducido un 20% el grosor de cada una de ellas. Estos avances, al combinarse, hacen que el bloque de la pila de combustible sea un 34% más compacto que el que se utilizaba en el anterior FCX Clarity.
Esta mejora ha permitido un aumento de la potencia máxima del motor hasta los 174 CV y un par máximo instantáneo de 300 Nm. Potencia suficiente para acelerar de 0 a 100 km/h en nueve segundos y alcanzar una velocidad máxima de 165 km/h. ¿Y de autonomía? Pues según Honda, puede recorrer con un depósito completo cerca de 650 kilómetros.
