A día de hoy, sin duda el hidrógeno es uno de los combustibles que podría solucionar en gran medida la contaminación en las grandes ciudades, una tecnología que está plenamente desarrollada pero que en el caso de España la falta de apoyos desde las instituciones –no hay a día de hoy posibilidad de recargar un coche de hidrógeno en España– está frenando su implantación.
Pero desde la Asociación Española del Hidrógeno (AeH2) se sigue trabajando para poder implantar en nuestro país el coche de hidrógeno, un vehículo que basa su funcionamiento en la generación de electricidad a través de una pila de combustible, y que cuentan con el distintivo “cero emisiones”, pues no emite C02 a la atmósfera.
Este tipo de vehículos dan respuesta a diversos planes de movilidad que tienen como fin la reducción de la contaminación, como sucede en Madrid. Pero, además de suponer un importante impulso para el medio ambiente, la industria del hidrógeno podría tener beneficiosas repercusiones en el terreno económico, social y medioambiental, según el análisis realizado por la Asociación Española del Hidrógeno.
De esta manera, se estima que, en 2030, podría alcanzar un volumen de negocio de 1.300 millones euros al año, y la creación de 227.000 puestos de trabajo. En el terreno medioambiental, su utilización conllevaría el ahorro de 15 millones de toneladas de C02 anualmente, gracias a la estimación de 14.000 vehículos que poblarán nuestras carreteras dentro de doce años. Así, se confirma el papel esencial de los vehículos eléctricos de pila de combustible en la descarbonización del sector transporte.
“En la actualidad, aproximadamente, 200 entidades trabajan para que estas estimaciones se convierten en una realidad con una inversión acumulada de 3.560 millones de euros a 2030”, ha afirmado Javier Brey, presidente de la Asociación Española del Hidrógeno.
El Mirai, una realidad
Durante la presentación de este estudio, hemos podido comprobar “in situ” los problemas para desarrollar esta tecnología a día de hoy en España. Toyota nos permitió probar brevemente el Mirai, una berlina que funciona con hidrógeno, pero sólo pudimos hacerlo en un corto recorrido. El motivo, llegó a España con el depósito al completo, pero no hay posibilidad en Madrid de recargarlo.
Eso sí, pudimos descubrir el funcionamiento del Mirai, suave en su respuesta en ciudad y enérgico con sus 154 CV de potencia. Una berlina que podría cubrir las necesidades de casi cualquier usuario, con la que poder moverse en ciudad con “Zero emisiones” y con la que poder viajar con su autonomía superior a los 500 kilómetros. Habrá que esperar todavía para poder disfrutarlo…