Hace apenas un par de meses Audi desvelaba el prototipo prologue, un modelo que venía a mostrar en principio un nuevo estilo en cuanto a diseño que podría verse en futuros modelos de la marca de los cuatro aros. Ahora, aprovechando la feria de electrónica de Las Vegas, en Estados Unidos, Audi ha dado un paso más con el prologue convirtiéndolo en un futurista híbrido en el que adopta su más moderna tecnología en materia de conducción autónoma.
Bautizado ahora como Audi prologue piloted driving, mantiene los trazos básicos exteriores del prototipo introduciendo todo un complejo sistema que le permite desplazarse por sí mismo. Así, cuenta con diversos láseres que sirven de escáner de la carretera, cámaras de video, sensores de radar y sensores de ultrasonido delante y detrás, todo ello gestionado por un ordenador central de asistencia al conductor llamado zFAS, el verdadero cerebro de este Audi autónomo. Gracias a todo ello, el prologue puede moverse por sí mismo en ciudad y carretera, algo en lo que Audi lleva ya trabajando desde hace años en busca de un sistema que, tarde o temprano, acabará por verse en coches de serie.
Otra de los aspectos que marcan al Audi prologue piloted driving es su mecánica, un V8 TFSI de 4 litros con transmisión automática e-tiptronic de ocho velocidades a la que se acopla ahora un nuevo motor eléctrico y una batería de iones de litio de 2,6 kWh, convirtiéndolo así en un turismo híbrido. La potencia, por ello, sube de 605 a 686 CV, mientras que el par motor también lo hace, de 71,4 mkg a 96,9 mkg.
De esta manera, las cifras de rendimiento y eficiencia se ven notablemente mejoradas, con una capacidad de aceleración de 0 a 100 km/h en tan sólo 3,5 segundos, mientras que el consumo mixto de combustible se queda en 7,9 l/100 km, con emisiones de CO2 de 185 g/km. Sin duda, cifras interesantes para un coche que roza los 700 CV de potencia.
