Con el Zoe consolidado como uno de los turismos eléctricos más exitosos en el mercado europeo, Renault sigue dando grandes pasos para que su gama eléctrica sea todo un referente de la industria del automóvil, una tecnología de la que ha sido una de las marcas pioneras y que será sin duda fundamental en el medio y largo plazo para implantarla como una de las soluciones de movilidad a la que todas las marcas aspiran.
De hecho, con el actual Zoe ya amortizado con unas ventas que le han llevado a convertirse en uno de los más vendidos en Europa superando las 100.000 unidades, la segunda generación del eléctrico de Renault continúa con su puesta a punto y será dada a conocer en las próximas semanas, una nueva generación del Zoe que arranca ahora su producción en la factoría gala de Flins del Grupo Renault-Nissan-Mitsubishi.
Aunque en breve Renault desvelará los principales avances –es de esperar sobre todo una mayor autonomía real aun– la comercialización del Zoe de segunda generación debería iniciarse ya a finales de este complicado año en lo que al sector del automóvil se refiere, marcado por los vaivenes de los mercados que siguen con grandes dudas de hacia qué tecnología dirigirse.
Y es que esta segunda generación del Zoe será uno de los vehículos clave en la nueva estrategia de electrificación del Grupo Renault-Nissan-Mitsubishi, unos planes estratégicos de este gigante del automóvil en el que se vislumbra el lanzamiento de hasta ocho nuevos vehículos eléctricos en los próximos cuatro o cinco años.
Menos costes de desarrollo
Desde su lanzamiento en 2012, Renault ha vendido más de 100.000 unidades del Zoe de sus dos variantes comercializadas, la última de ellas con el motor eléctrico de 110 CV y una autonomía en circunstancias reales de conducción que supera los 300 kilómetros. La primera, que mantiene de momento a la venta, incluye un motor menos potente de 92 CV y menor autonomía.
Un modelo ya en su ciclo final de vida que dará paso en breve a la segunda generación que se basará en la nueva plataforma compartida CMF-EV de la Alianza Renault-Nissan. No hay mucha información todavía, pero se estima que los costes de investigación y de desarrollo se podrían reducir en torno a un 40%, mientras que el coste de producción debería bajar en torno a un 30%. Por otro lado, también se anuncia el desarrollo de un nuevo motor eléctrico así como una batería también menos costosa de fabricar. Por todo ello, se espera que el precio por kWh consumido en la nueva generación de coches eléctricos de la Alianza podría reducirse en torno a un 30%.
Además del Zoe, el otro gran protagonista del segmento de los coches pequeños será el nuevo Clio de quinta generación, un modelo que llegará también electrificado pero en el formato de híbrido enchufable, una opción al propio Zoe con su etiqueta Cero Emisiones de la DGT y que será una de las versiones más eficientes de la gama.