Hay neumáticos para todos los gustos y colores. De verano, de invierno, mixtos, de campo… pero la gran mayoría de turismos que circulan por nuestras carreteras apenas conocen, los usuarios más bien, cómo es el neumático que le mantiene en contacto con el asfalto. Pero lo que cada vez gana más terreno es, sin duda, la apuesta por la seguridad en la conducción, y neumáticos como el nuevo Primacy 4 de Michelin contribuyen a ello por su especial diseño pensado para ofrecer sus mejores prestaciones en asfaltos mojados, un neumático destinado a equipar desde un pequeño compacto a una gran berlina, segmento que representa el corazón del mercado.
Sucesor del Primacy 3, aporta además mejoras no sólo en adherencia sino también en duración, manteniendo según la marca todas sus prestaciones intactas desde el primer kilómetro hasta alcanzar el límite legal de desgaste de 1,6 milímetros de profundidad. Tendremos que comprobarlo en el tiempo, pero todo el esfuerzo de la marca francesa en el desarrollo de este nuevo neumático ha ido encaminado a ello, a ofrecer a lo largo de toda su vida un mismo comportamiento en lo que a adherencia se refiere. Desde luego, en sus primeros kilómetros de vida, el resultado es muy bueno en cuanto a adherencia en mojado y en tacto en el guidado en curva.
Reconocen que hay neumáticos de la competencia que pueden llegar a ofrecer mejores prestaciones en cuanto a agarre en seco y mojado en sus primeros momentos, pero están convencidos que con miles de kilómetros recorridos los Primacy 4 mantienen mejor que nadie sus características.
Michelin, como marca premium, apuesta por aportar valor, con productos tecnológicos, que ofrecen altas prestaciones en términos de seguridad, duración y protección del medioambiente. La renovación de la oferta con el lanzamiento del nuevo Primacy 4, en el segmento de neumático más importante del mercado, reafirma la posición de la marca para una movilidad más sostenible.
Neumáticos para una movilidad sostenible
Fiel a su razón de ser, la marca francesa innova y desarrolla neumáticos para una movilidad más segura, más eficaz y más respetuosa con el medioambiente, asegurándose que las prestaciones duren desde el primero hasta el último kilómetro.
La obsolescencia programada de los neumáticos supondría en Europa un incremento de 126 millones en la cantidad de neumáticos consumidos, 7.000 millones de euros en gastos suplementarios para los consumidores y un incremento de 9 millones de toneladas en las emisiones de CO2. Para evitar que esta situación se produzca, Michelin recomienda que se utilicen los neumáticos hasta su límite legal de desgate.