La apuesta de Skoda por seguir creciendo como marca le ha llevado a adentrarse en un segmento inédito hasta la fecha para ella, el de los grandes SUV o todocaminos. Y lo ha hecho con un Kodiaq que propone muchos argumentos para poder considerarlo como una alternativa económica a los más lujosos, y caros, SUV del momento. Porque su precio se espera arranque en el entorno de los 27.000 euros, ajustado para tratarse de una carrocería de 4,70 metros de longitud en formato todoterreno.
Una carrocería que ha permitido diseñar un interior verdaderamente ejemplar por su amplitud, una seña de identidad de la marca en modelos como el Octavia y, sobre todo, el Superb, verdadera referencia cuando se habla de habitabilidad. El Kodiaq también lo será en su segmento, con un habitáculo en el que habrá cabida para siete plazas y que en sus versiones de cinco asientos ofrecerá un maletero de auténtico récord en su capacidad, 720 litros. Incluso con siete plazas, cuenta con 270 litros.
Todo ello con una configuración interior que permite grandes dosis de modularidad. Los asientos de la segunda fila se pueden deslizar longitudinalmente 17 centímetros y los respaldos centrales se pueden reclinar y abatir en proporción 40/20/40. Dispone de mandos en el maletero para poder plegar fácilmente los respaldos y añade nuevas funcionalidades al poder abrir y cerrar el portón posterior con sólo pasar el pie por debajo del paragolpes.
Su condición de todocamino viene dada no sólo por las formas de su carrocería, sino también por cifras como su altura libre al suelo de casi 20 centímetros, un ángulo de ataque de 22 grados o la tracción total, que le permitirán circular por zonas relativamente complicadas fuera del asfalto. En opción para todas las versiones hay un selector de modos de conducción que modifica, entre otras cosas, la velocidad de respuesta del motor, el funcionamiento de la caja de cambios automática (en las versiones que la tengan) o el funcionamiento de la dirección asistida. Los modos disponibles son Normal, Eco, Sport, Individual y Snow, este último exclusivo de las versión con tracción a las cuatro ruedas y que modifica el funcionamiento de sistemas como el ABS y el control de estabilidad, reduce la sensibilidad del pedal del acelerador y activa el control de descenso de pendientes para incrementar la adherencia en superficies con poco agarre.
Hay más sistemas de ayuda a la conducción. De serie u opcionalmente cuenta con alerta por cambio involuntario de carril, un detector de vehículos en el ángulo muerto, un programador de velocidad activo, un sistema de aparcamiento semi-automático, un conjunto de cuatro cámaras que generan una vista cenital del vehículo y sus alrededores, frenado automático al retroceder si aparece un obstáculo y el frenado de emergencia en ciudad con detección de peatones.
En cuanto a los motores, cinco son las opciones de incio, tres de gasolina —125, 150 y 180 CV— y dos diésel —150 y 190 CV—. La tracción total, conectable automáticamente, está disponible para los motores a partir de 150 CV de potencia; la delantera es la única posible en el de 125 CV y una opción en los de 150 CV. La versión con el consumo más bajo es el 2.0 TDI de 150 CV con cambio manual y tracción delantera, homologando 5,0 l/100 km.
Aunque las dimensiones del Kodiaq son muy notables, está construido sobre la misma plataforma de modelos como el VW Tiguan o el Seat Ateca, aunque con mayor distancia entre ejes.
