El previsiblemente nuevo presidente de los Estados Unidos ya ha tenido experiencia con un presidente socialista del Gobierno español. Y no le dolieron prendas en arengar a los soldados españoles que luchaban en Afganistán ante un José Luis Rodríguez Zapatero que llevaba años sin pisar un cuartel para dar ánimo a las tropas.
Zapatero llevaba casi seis años sin visitar una base del Ejército español salvo para asistir a un funeral. La última vez que lo había hecho fue, curiosamente, para recibir a las tropas que él mismo había ordenado retirar de Irak en cuanto llegó al Gobierno. Seis años después, en 2010 en Paracuellos, acompañaba al entonces vicepresidente de los Estados Unidos, Joe Biden.
El futuro presidente de los Estados Unidos, si Trump y el recuento definitivo no lo impiden, dirigió ese día ante el pacifista Zapatero una arenga en toda regla a las cuatro compañías de la Bandera Roger de Lauria de la Brigada Paracaidista que iban a relevar en unos meses a los legionarios de la Bandera Millán Astray.
Zapatero llevaba seis años sin visitar una base del Ejército español salvo para un funeral. En 2010, en Paracuellos, asistió a la arenga que les dedicó el entonces vicepresidente de EEUU, Joe Biden
Cuatrocientos paracaidistas formados en la explanada principal de su base en Paracuellos del Jarama cumplimentaron y cumplieron sus ritos militares y religiosos -homenaje a la bandera, oración por los caídos y desfile a paso ligero- ante Biden, destacaron las crónicas del día.
Las mismas que señalaban cómo el vicepresidente de los EEUU "les cubrió de los elogios que nunca habían recibido del Gobierno de Zapatero, les calificó de "verdaderos guerreros", recordó que había sido él mismo quien pidió al Ejecutivo español dirigirse a los soldados que estaban o iban a ser destinados a Afganistán junto a los militares estadounidenses y recordó que era "padre de un hijo que acaba de volver de Irak y que, por lo tanto, sabe lo que es la ansiedad y la preocupación de la espera".
Biden habló de Dios, ZP deseó suerte
Biden habló de acabar con las bases terroristas, combatir a los insurgentes, recordó los ataques del 11-S y el 11-M, y aludió al deber, al honor y al orgullo de las tropas que se ocupan de que esas tragedias no vuelvan a ocurrir. Y se despidió con un «que Dios les bendiga y les proteja». En contraste, Zapatero cerró el acto con un "suerte". El Jemad, José Julio Rodríguez, hoy en las filas de Podemos, había presentado primero el acto al que asistieron todos los jefes de Estado Mayor y altos mandos de los tres Ejércitos.
Esta semana, 10 años después, se ha sabido que el Gobierno, a la espera de que se certifique el triunfo de Biden, prorrogaba un año más el acuerdo de uso de las bases de EEUU en España. El silencio de la parte de Podemos en el Gobierno -incluido el ahora jefe de Gabinete de Pablo Iglesias, el exjemad José Julio Rodríguez- ha sido atronador.