Lo de Freud funciona. Somos una enorme cafetera italiana que está dotada de una pequeña válvula por la que escapa vapor cuando el interior alcanza un punto de ebullición. Si ese mecanismo se taponara, sucumbiríamos ante la neurosis. Nos volveríamos inestables e imprevisibles. Por eso es necesario celebrar la Liga de Campeones del Real Madrid -o lo que sea- como una victoria personal. Y por eso el mundo ha mirado durante las últimas semanas a Johnny Depp y a Amber Heard por la forma en la que han expuesto ante el público su basura personal. Sin regodearse en los conflictos personales de otros, habría quien reventaría. A veces, es mejor criticar que psicoanalizarse. Es pura supervivencia.
Siempre que ocurre un episodio de estas características, alza la voz algún iluminado -con perfil de profesor de secundaria y de izquierdas- para advertirnos de que hemos distraído la atención de lo importante. De la inflación, del precio de la gasolina, de la toma de Ucrania o del coronavirus. No entienden nada. Son simples e infelices. Pareciera que la conciencia social no debiera descansar nunca, como si la suya no se fundamentara en frases hechas y medias verdades. Como si su línea de pensamiento no hubiera sido escrita por el guionista del Gran Wyoming o alguno similar.
Quisieran que los españoles dedicaran los domingos y los minutos de la vigilia a informarse sobre los intereses de la deuda, los rohinyá y los enchufes de la Cañada Real. Así, hasta reventar.
No se puede acribillar a los ciudadanos por asistir a estos circos contemporáneos. Seguramente, sea un error el intentar escapar de las frustraciones cotidianas a partir de las lágrimas de cocodrilo de Rociíto, los conflictos entre Piqué y Shakira o los resultados de las noches de alcohol y drogas de la pareja de idiotas más famosa de Hollywood. Pero en un mundo cada vez más rápido, cambiante e incomprensible... estos espectáculos gratuitos alivian. No creo que ninguno de los individuos que ha estado pendiente del proceso judicial de los actores deba tener problemas de conciencia. El litigio no solucionará sus cuestiones familiares y laborales, pero quizás alivie la carga. Por tanto, que callen para siempre los sacerdotes de la moral pública.
Johnny Depp y los carroñeros mediáticos
Otra cosa es el debate sobre el tratamiento mediático de este tipo de espectáculos televisivos. En este caso, hay quien ha aprovechado el veredicto del jurado -que es malo para ambos, pero nefasto para ella- para avisar sobre las consecuencias que podría tener para las víctimas de la violencia de género de todo el mundo el que un jurado falle en contra de una mujer.
Ahí es donde se encuentra la maldad. Porque, hace pocos años, parecía impensable que alguna de las mujeres que se adhirió al movimiento MeToo en la situación -o en el papel- de víctima estuviera ofreciendo a la sociedad un falso testimonio. Parecía que todas las palabras que pronunciaban eran ciertas y que su verdad era incuestionable. Y, claro, llegados a 2022, ha habido un jurado que ha recibido distintas pruebas de que la exmujer de Depp era una difamadora profesional... y la ha declarado culpable.
Lejos de advertir de que Heard es un mal ejemplo y de los peligros que implica el prejuzgar a alguien por su características biológicas -sea el sexo o el color de su piel-, las especialistas en igualdad se han apresurado a advertir de que existe el riesgo de que las mujeres maltratadas no acudan a la policía a partir de ahora por miedo a que desconfíen de su versión. Como si fuera muy complejo determinar que la situación de esta pareja de desequilibrados, ricos y caprichosos es completamente diferente a la de las pobres que son vejadas de distintas formas por animales que las convencen de que, si les dejan, no tendrán los recursos ni la capacidad suficiente para afrontar la vida.
Hay que ser pérfido para mezclar ambas situaciones. Y hay que ser jeta. Porque, lejos de ayudar, confunden, a sabiendas de que este tipo de declaraciones ayudan a que sus chiringuitos sigan en pie.
Lo de Depp y Heard nada tiene que ver con la violencia doméstica, sino con el accidentado divorcio de dos personajes públicos, el cual se utiliza para configurar la programación del circo contemporáneo
Lo de Depp y Heard nada tiene que ver con la violencia doméstica, sino con el accidentado divorcio de dos personajes públicos, el cual se utiliza para configurar la programación del circo contemporáneo. Lo suyo es lo mismo que lo de Rociíto, lo de Belén Esteban... o lo de cualquier crimen mediático que los periodistas diseccionan -como forenses- para ganar audiencia.
A la prensa y a las televisiones les encanta la carroña, así que en estos casos no suelen aplicar la prudencia. Por eso, las fotos de Depp de resaca han dado la vuelta al mundo. O las de las redes sociales de jóvenes que fueron asesinados en circunstancias misteriosas. Ojo, tampoco nadie (o casi nadie) reclama contención. Porque el sensacionalismo no es una lacra que se quiera erradicar. Es algo que unos ofrecen y otros consumen gustosos.
Los malvados confunden sobre el origen del problema; y los descarriados atribuyen las culpas a quien recibe ese torrente de bazofia, no a quien lo emite. Pero la realidad indica que quien está pendiente de Rociíto, de lo de Depp o de los líos de faldas del emérito es porque necesita paliar su aburrimiento, saciar su morbo o un poco de diversión al final de otro día rutinario. Necesita que su válvula expulse vapor para no estallar. Y no es más que eso. Pero eso es esencial.
Eso sí, todo esto también tiene un peligro. A veces, se elige ser gladiador en el circo. O espectador. Pero a veces uno se ve en la arena, a pocos metros de un león y sin haberlo elegido. Se convierte en carnaza sin quererlo. Por Amber Heard o por quien sea. Siempre hubo mártires.
Dudandomucho
También podríamos ver todo esto desde otro punto de vista, ojo mujeres que ponéis denuncias falsas porque seréis castigadas. Y esto sí que en España es más complicado porque en nuestro país las denuncias falsas de mujeres no existen.
eddo
este es el peor, es forense, profesor, y el gobierno de Sánchez le ha dado un premio por su labor y un sueldo como divulgador en colegios para que los chicos sean "educados" con la legalidad hembrista, para que no hagan lo mismo que sus abuelos tíos, padres, junto con Mabel Lozano, otra vividora que además utiliza a inspectores de policía para sus relatos para criminalizar a los hombres, y ser subvencionada. Miguel Lorente es médico forense y profesor de Medicina Legal en la Universidad de Granada y, además, fue Delegado del Gobierno para la Violencia de Género de 2008 a 2011. "El bulo de que hay muchas denuncias falsas busca normalizar esa idea que trae como consecuencia la falta de implicación y de compromiso de quien lo cree", explica. En su opinión, beneficia a quienes quieren perpetuar los privilegios del hombre frente a la mujer y consigue que "se acomoden en sus creencias". "Este juicio se utilizará para mal en denuncias posteriores porque hay intereses para hacer norma de una excepción", afirma. En cambio, continúa, no aplican esta regla de tres cuando un hombre maltrata y se apresuran a contraatacar con el famoso #NotAllMen. Lorente considera que también se lanza un aviso a navegantes muy peligroso, máxime cuando hay muchos casos que, por estar normalizados, no se denuncian. "No olvidemos que el 80% de las mujeres asesinadas nunca ha denunciado". "El mensaje que puede quedar con casos como estos es 'Cuidado si denuncias porque puede volverse contra ti'", en referencia a una querella por difamación como la que el actor Johnny Depp interpuso contra Amber Heard.
eddo
A Carmen Benito es la presidenta de la asociación Mujeres unidas contra el maltrato (MUM), una entidad que ofrece apoyo multidisciplinar a mujeres afectadas por la violencia de género. Reconoce que este caso tan mediático perjudica la concienciación social sobre la existencia concreta de estas violencias, pero distingue: "Quienes la niegan se agarran a un clavo ardiendo, pero no debería afectar a los jueces ni suponer un lastre más para las mujeres", precisa. "Claro que hay mujeres agresoras a las que se les aplica la ley y son castigadas. La diferencia es que ellas no maltratan a un hombre por ser hombre. En el caso de la violencia de género, en cambio, el maltrato se dirige hacia las mujeres por el mero hecho de serlo", concluye. Yo lo niego Carmen
joluisma
Los VOTANTES, ya no están para pensar, son "algo mayores". Hay que captar gente joven, como hacen los de izquierdas. En las UNIVERSIDADES, en los CENTROS DEPORTIVOS, etc, fomentando la "igualdad" y a los violentos, junto con sus padres expulsarlos a la primera. Que vayan a KARATE, KUNG-FU, y demás deportes de CONTACTO. Se lo que estoy diciendo, popr mucho que quieran decir que no, LA VIOLENCIA genera VIOLENCIA
Petrapacheco
Qué bueno es el señor Arranz. Chapeau.
eddo
Muñiz hace hablar a una psicóloga. Que que no tiene sus dos piernas metidas en la ayuda a mujeres dentro de las redes creadas para eso. de Ana Villarubia es psicóloga sanitaria y, aunque precisa que el juicio resulta distante a la realidad española, sí reconoce el poder desincentivador ante posibles denuncias futuras de otras mujeres: "Alguien en situación de maltrato puede pensar que si Amber Heard, con su poder y recursos para contratar buena defensa, no ha podido demostrar "su verdad", ¿cómo va a lograrlo ella que a lo mejor tiene un abogado de oficio?", reflexiona. Otra consecuencia, explica, es el temor a tanta exposición mediática: "Aquí no se retransmiten los juicios, como en EEUU, pero sí podemos ver en los medios el seguimiento de los casos. Una mujer puede llegar a temer encontrarse en la misma posición en la que ha estado Amber. La imagen de ella ha sido muy impactante".
eddo
por si acaso o puedo poner el enlace voy a copiar la versión de M Muñiz en ELMUNDO sobre el tema. Ella llorando y este texto "Los momentos más críticos del juicio de J Deep. La hembrista quiere mostrar a Deep como la interesa a ella, maltratador, como con Arcuri antes, violador, como los absueltos en casos como los ex jugadores de la Arandina. Y es legal porque no se la denuncia por delitos contra los hombres por el hecho de serlo, por falta de concienciación.
eddo
Patri "compañera" de AR pregunto a una siquiatra su opinión sobre las declaraciones en sede judicial de ella, Patri "compañera"! de AR estaba consternada por lo mal que lo paso, la doctora dijo que era una actuación, todo, de el o dijo nada ya que a Patri " compañera" de AR que se indigna con las violaciones grupales, "manadas, jaurías", con sentencias provisionales a secuestradoras de menores que se les quita la custodia pero no se las mete en la cárcel, no la indigno a Patri su relato, solo la de ella.
dca
Exactamente, son la élite extractiva y criminal que usa el poder para delinquir y para evitar el banquillo.