La persona que subirá a la tribuna del Congreso de los Diputados para presentar la moción de censura contra Pedro Sánchez será Ramón Tamames, pero en realidad ¿quién hablará por su boca? ¿quién se dirigirá a sus señorías para hacer un diagnóstico de la desquiciada situación en la que se encuentra España, con sus peores enemigos en el puente de mando del Estado, sus recursos saqueados por una clase política extractiva para su beneficio electoral o en demasiados casos su lucro personal, un orden social, moral y social en trance de destrucción, la unidad nacional severamente cuarteada y la Corona, símbolo de nuestra continuidad histórica y garantía última de la vigencia de la Constitución, marginada por una parte del Gobierno, insultada y humillada por la otra, atacada zafiamente por los separatistas, mientras aquellos que debieran defenderla contemplan pasivamente tales desmanes? ¿quién bajo la figura del sabio catedrático cuyo célebre texto de referencia sobre Estructura Económica de España han tenido que estudiar millones de economistas, ingenieros, sociólogos, abogados o diplomáticos para conseguir sus licenciaturas o sacar sus oposiciones a lo largo de seis décadas de vida española, describirá los males de la patria y como adalid de un nuevo regeneracionismo, tan distinto al que tronó tras el Desastre de 1898, pero igualmente perentorio, flagelará a sus responsables y propondrá las soluciones tan largamente demoradas?
No será el partido que le ha nombrado su candidato porque en este caso hubiera recurrido lógicamente a su propio jefe de filas. Además, se ha sabido que no hay acuerdo entre la fuerza impulsora de la moción y el candidato Tamames en el tratamiento de temas sustantivos para Vox y sus votantes, como el modelo territorial, el feminismo, el aborto o la inmigración. Por tanto, no hablará como portavoz de la formación conservadora, católica y nacionalista que, pese a ello, le ha pedido que actúe como protagonista en este relevante acontecimiento público. Y, por supuesto, no comparecerá animado por el resto de grupos de la oposición, que ya han declarado que no apoyarán la moción porque la consideran inoportuna, incomprensible y hasta grotesca. Tampoco disertará a título exclusivamente personal porque, francamente, invertir dos jornadas de sesión plenaria solemne en la Carrera de San Jerónimo para conocer las opiniones y las recetas para enderezar el rumbo de España de un ciudadano concreto, por grande que sea su prestigio social, por alto que sea su nivel académico y por dilatada y fecunda su experiencia vital y política, resultaría excesivo.
La persona que subirá a la tribuna del Congreso de los Diputados para presentar la moción de censura contra Pedro Sánchez será Ramón Tamames, pero en realidad ¿quién hablará por su boca?
La concentración de Cibeles
Puestas así las cosas, hay una idea que subyace en todo este asunto y es el sentimiento difuso. Indefinible, intuitivo, implícito, pero real y tangible, que experimentan desde hace tiempo amplias capas de la sociedad española de que estamos en un camino equivocado que nos lleva al fracaso colectivo y que los dos partidos que han pilotado y desarrollado básicamente el sistema político, institucional, social, cultural, ético y administrativo diseñado en 1978 como fruto de un trascendente y ejemplar pacto civil, no son ajenos a este deterioro, no se han mostrado aptos para su misión y ha llegado la hora de llamarles al orden desde la sociedad civi. La concentración de medio millón de ciudadanos convocados por un centenar de entidades cívicas en la plaza de la Cibeles el pasado 21 de enero por España, la democracia y la Constitución y el impecable, irreprochable y lúcido manifiesto leído en aquella radiante y fría maña madrileña pueden ser vistos como el primer clarinazo de alerta del que la insólita moción de censura a cargo de Ramón Tamames sería el segundo redoble de aviso.
Es posible que los dirigentes de Vox, sin ser plenamente conscientes del alcance y el sentido de su iniciativa y libres al fin y al cabo de cualquier papel en la gestación del desastre actual -su reciente aparición sería más bien uno de sus síntomas- hayan querido hacerse eco del malestar profundo de muchos españoles en esta hora de posible desplome y darles voz en la fatigada garganta de un venerable, respetado y docto profesor al que debemos desear acierto en la difícil tarea que tan generosamente ha aceptado acometer a la vez que le agradecemos el valioso servicio que va a hacer a nuestro país.
Alexander
Lo más probable es que al día siguiente de que hayan terminado las sesiones de la moción de censura el actual Gobierno seguirá llevando a cabo las mismas políticas que hasta ahora. Las propuestas del Sr. Tamames caerán en saco roto y parece ser que ni tan siquiera propondrá la derogación de las aberrantes leyes de ingeniería social que está promulgando este Gobierno, con la ayuda de los grupos parlamentarios que le apoyaron en la investidura. Lo que me gustaría es que, alguna vez, un candidato a presidir el Gobierno de España expusiera, de forma clara y coherente, su proyecto para el futuro de España, en cada una de las áreas que son de la competencia de un Gobierno nacional. Por lo demás, mi enhorabuena al Sr. Vidal-Quadras por este excelente artículo.
ma
Inversión récord en ciencia y tecnología Inversión récord en defensa. Deuda más baja que Francia o Italia , y bajando. Creciente protagonismo internacional. Etc. Cierto es que España ya no mantiene la soberanía sobre parte de su territorio, hasta el punto de que su idioma nacional está prohibido y perseguido, pero esto también pasaba con el PP, que se lo pregunten a Feijoo y su aniquilación del español en Galicia. Para qué quiere España seguir financiando parásitos en Vizcaya, Guipúzcoa o Gerona otros doscientas años?
Talleyrand
Buen articulo Esto ya no va de siglas. Esto va de patriotismo. No podemos mas con los impuestos, el paro eterno, el ser cada dia mas pobres, el desprecio y la ruina que los políticos nos estan infringiendo y muchos de nosotros no confiamos en que Feijoo resuelva el problema. Ya esta dicho.
vallecas
Como le decía al Sr Cacho. La moción será útil si logra que Pedro Sánchez tenga la quijada apretada durante horas. ¿Será D. Ramón de 90 años capaz de hacerlo ??
UCDM
Que todos los q hablan de amor, trascendencía, alma, rosarios, rezos. sea vomitando odio hacía el prójimo, no lo veo yo muy cristiano. Eso de amar a tu enemigo y poner la otra mejilla como que no. Al menos no sean fariseos ni se escuden en Jesús. Lo de rezar rosarios y llamar frutas a las mujeres, insultar a la esposa del presidente electo con el vuestro amado ´Begoño" pasear muñecas hinchables, insultos homófobos a Marlaska, racismo, machismo. Bandear el símbolo nazi. Todo esto le hace sentirse orgullosos a ustedes de lo q llaman su patria?, su pueblo?, los suyos? Dígame en q se diferencian entonces de los q usted insulta y recrimina? al menos ellos no ponen a cristianismo como panfleto. Pobre Jesús de Nazareth cuanto daño se hace en su nombre. Pero por vosotros actos también nos pide perdón.
JoseAntonioRuizAragonMunoz
Don Alejo, Vox no es nacionalista, es patriota que es algo muy distinto, conviene usar palabras DISTINTAS para denominar a lo que es DIFERENTE. Y los partidos nacionalistas que en España son separatistas, son muy distintos a Vox que es simplemente, como digo, patriota. Los nacionalistas siempre necesitan de un enemigo, generalmente interno o sea en la misma nación, aunque algunas veces es externo a ella. En cambio los patriotas no tienen ningún enemigo interno ni externo, simplemente aman a su nación y la quieren unida y fuerte. Y la defienden contra quienes la atacan.
Norne Gaest
Suelo leer con placer sus artículos, D. Alejo, y éste no esta mal, salvo un poco crecido en cuanto a Vox y su consciencia, y a sus electores ¿Como es eso de que Vox "haya querido hacerse eco" del malestar...? ¡Es que hace algunos años que se viene haciendo eco, y dando la cara, y aguantando la demonización e insultos, y además casi siempre en solitario! Y lo vota gente muy variada, no solo ex votantes del PP ¿Como es eso de "sin ser plenamente conscientes"? Como mide Vd. la consciencia de los dirigentes de Vox? Vox tiene precedentes culturales aparte de la procedencia o sentimientos de los votantes (seguro que le suena lo relativo a combatir la leyenda negra anti española, el entorno cultural del profesor G.Bueno, Denae, etc.). Y Vd. debería conocerlos. Y si Vd. ve cualquier discurso o entrevista de Abascal o Espinosa de los Monteros vería que son "plenamente conscientes" de lo que dicen y que sus biografías muestran que no buscan ni necesitan el medro, es decir, que no son oportunistas. En cuanto a los votantes, se lo voy a poner fácil, para que vea su variada procedencia: yo mismo, como Tamames, fui comunista (2 o 3 años) en la Transición (recuerdo a un mitin en Vista Alegre donde participó D. Ramón junto con Carrillo, Camacho y allí estaba incluso La Pasionaria), aunque tengo 20 años menos que el profesor, y creo ser tan plenamente consciente como Vd. de la cuestión política. Por eso luego estuve varias décadas sin votar, por no contribuir a la estafa partitocrática que pronto se instaló. Y luego creí unos meses en UPyD, pero pronto me retiré de esa formación y no me extraña que acabase como acabó. En fin, que a veces viene bien ser pelín más humilde en las apreciaciones, dicho sea dentro del respeto que merece.