El delito de odio es otra herramienta progre para lubricar el ambiente represivo y el control de los ciudadanos. Amén de imponer la moralina buenista que tan importante papel ha jugado y juega en el embobecimiento español. Nunca olvido la conversación con un amigo, a raíz de un asesinato de ETA, al que dije que mucho mejor hubiera sido que el muerto hubiera estado armado y atento y le hubiera volado la cabeza al etarra que venía a matarlo. La respuesta de mi amigo español me dejó estupefacto. Dijo: Ah no, eso sí que no, matar no. Lo que implicaba que prefería el sacrificio de la víctima antes que la justa defensa que eliminara al asesino. A ese grotesco nivel de bobería buenista han llegado algunos españoles.
El delito de odio es un trampantojo. Ninguna ley puede castigar los sentimientos. Si lo hace, ya no es ley sino imposición ideológica, religiosa o moral. Tenemos derecho a odiar tanto como queramos. Y lo dice alguien que ha llegado a la conclusión de que, por grande que sea el odio que sienta, este desemboca al final en una especie de piedad por la especie. ¡Qué grotesco, bruto, violento, miserable, ridículo, cruel y siniestro puede llegar a ser el chimpancé humano! Si alguien lo duda le recomiendo echar un vistazo al mundo, sin anteojeras buenistas.
Creo recordar que lo de la piedad final se lo escuché por primera vez a Reinaldo Arenas. Aunque es cierto que Arenas también dijo: Óyelo bien; yo soy quien he triunfado, porque he sobrevivido y sobreviviré. Porque mi odio es mayor, mucho mayor que mi nostalgia. Y cada día se agranda más. Odio areniano al fidelismo y al comunismo. Odio que comparto, naturalmente. No es una cuestión política, es una cuestión de decencia. Y es una cuestión personal, no lo ocultaré: jamás perdonaré la miseria y los sufrimientos que el castrismo hizo padecer a mi madre. Odiaré a esa basura fidelista y socialista y comunista hasta el último día y hasta el último aliento. La prueba definitiva de que la estupidez humana es infinita (Einstein) es el prestigio del que sigue disfrutando el comunismo (véase al Gobierno español, lleno de comunistas), a pesar de su catastrófica y criminal historia.
Llámenme suspicaz, pero me parece que lo de cobrar por las bolsas de plástico en los comercios para salvar el planeta, es una pieza más del negocio descomunal en que se ha convertido la doctrina ¡Salvemos el Planeta!
El delito de odio, el lenguaje inclusivo, la catequesis progresista, la regulación de las horas a las que puedes sacar a mear el perro, las multas por desobedecer la dictadura del reciclaje, el encierro durante el virus chino, la estupidización escolar, las salidas a aplaudir al balcón como macacos amaestrados, la restricción o prohibición de la circulación de coches en nombre de la salvación del planeta, y toda suerte de normativas metomentodo, son parte de la misma faramalla excretada por un ejército de ideólogos cuya misión es convertirnos en esclavos voluntarios de un Estado cada vez menos libre, más uniforme y controlador. Colectivización es la palabra de orden, que diría un castrista.
Hacia ese horizonte regimentado marchamos obedientes, felices. Dispuestos a salvar el planeta. ¡Salvemos el Planeta! ¿De veras alguien cree que si el planeta decide irse a la mierda (como se ha ido muchas veces en sus 4.543 millones de años de existencia) los seres humanos podremos impedirlo? ¿Recogiendo latas de aluminio? ¿Haciendo la guerra al plástico, ese invento maravilloso? ¿Reciclando vidrio? ¿Pagando por las bolsas en los comercios? Llámenme suspicaz, pero me parece que lo de cobrar por las bolsas de plástico en los comercios para salvar el planeta, es una pieza más del negocio descomunal en que se ha convertido la doctrina ¡Salvemos el Planeta! ¿A qué se dedica todo ese dinero? Al menesteroso sistema de Salud Pública seguro que no. A mejorar la calamitosa educación de los jóvenes españoles, tampoco.
Detrás del tinglado ¡Salvemos el Planeta! que montó Al Gore y que tiene como símbolo a la poseída niña del exorcista (Thunberg), están ¡cómo no! los políticos y sus cohortes de parásitos y truhanes haciendo fortuna como acostumbran. El proclamado temor catastrofista es una máquina de hacer dinero vía impuestos. Si algún día el planeta se va a la mierda no será porque contaminamos demasiado o usamos demasiado plástico, será porque los seres humanos lo harán reventar en alguna estúpida guerra.
La misma libertad individual que permite odiar, da derecho a fabricar, colgar de un semáforo por el cuello y apalear un muñeco–piñata de Sánchez
Y así llego al muñeco piñata de Pedro Sánchez, que tantas alharacas buenistas ha provocado. A ver, sosiéguense, progres y legiones de asesores sueldazo dedicados a diseñar el discurso público y el lloriqueo sentimental general. La misma libertad individual que permite odiar, da derecho a fabricar, colgar de un semáforo por el cuello y apalear un muñeco–piñata de Sánchez. No sé el grado de efectividad que tendrá lo del muñeco–piñata, la verdad. Personalmente, me parecen más efectivas las huelgas generales o las manifestaciones que bloqueen sedes de gobierno. Pero. Cada cual tiene derecho a protestar contra la creciente autocracia del sanchismo, de la manera que mejor le parezca.
La izquierda triunfa en España porque siempre ha conseguido imponer su marco mental. Un marco mental que, complejos de inferioridad, corrupción, partitocracia y burricie mediante, acepta y adopta la llamada oposición y la señoritinga derecha oficial (PP). Desgraciadamente, cada día que pasa, España es menos el país de todos y más una ubre parasitada a la que se aferran quince pulgas folklóricas comandadas por dos orondas e insaciables garrapatas identitarias.
Petrarca
¡Bravo, señor Abreu¡ Claro y contundente. Como nieto de cubano me pongo a sus órdenes para cuando estemos preparados para barrer la inmundicia comunista.
Urenga
Guau, todavía estoy temblando de la emoción al leer la arenga.
Leonidas
Sólo quienes han padecido el comunismo, saben de lo que hablan. En España estamos empeñados en ir al esclavismo, mientras las chorradas de género y ecologistas hacen millonarios y vivir del cuento a una tropa de parásitos, a cuenta de nuestra ignorancia. Una pena
vallecas
La zona de bajas emisiones para proteger la "almendra madrileña" la creo la alcaldesa Manuela Carmena, Una mezcla de Podemos- Ahora Madrid, y Comunismo rancio.
Xirolme
El delito de odio creo que se montó,originariamente, para proteger a sus admirados judíos y la derecha madrileña, para proteger el aire en su almendra madrileña, nos impide entrar con nuestros viejos coches. Vivir para ver
S.Johnson
"España es menos el país de todos y más una ubre parasitada a la que se aferran quince pulgas folklóricas comandadas por dos orondas e insaciables garrapatas identitarias." Creo que hay un error tipográfico ¿no falta la palabra MILLONES por algún sitio?
Wesly
Perdón, mi comentario a salido como respuesta al suyo. Resulta difícil comentar desde el móvil.
Wesly
Dice el Sr. Rodríguez Ibarra que "no hay diálogo posible ni nada que negociar con el Independentismo". Muy bien, estoy de acuerdo. Entonces, porqué el socialista Zapatero prometió aprobar el nuevo estatut que saliera del Parlament, incentivando un estatut claramente inconstitucional, lo que, al ser mínimamente recortado por el TC, dió lugar al victimismo y alimentó el independentismo?. Entonces porqué el socialista Sr. Pedro Sánchez elige a los independentistas como socios preferentes, les indulta, les anula el delito por el que fueron condenados, les rebaja malversación, les acepta una mesa de diálogo al margen del Parlamento y negocia con ellos la posibilidad de un referéndum?. Entonces porqué Ud., que tiene las ideas tan claras, no se dá de baja del PSOE?.
Silvania
Gracias por sus apasionados artículos. Son como una racha de viento fresco que entra por la ventana de una pequeña habitación que lleva mucho tiempo sin ventilar y huele ya a perro muerto.
Norne Gaest
Esto es un desastre (escribo tras la sesión en el Senado de ayer, como digestión del aperitivo). Las izquierdas y el nazionalismo han hecho bien su trabajo: han marcado a fuego que las derechas y España, respectivamente, son tabú, algo malo per se. En esto son implacables, profesionales (viven del engaño y la propaganda, no se olvide): no solo consiguen que gente a menudo bienintencionada, pero ignorante, los sigan votando, sino que acomplejan a los teóricos opositores y demonizan todo lo que no les baila el agua.. El PP sigue haciendo frases, pero es incapaz de plantarse ante la progresiva (sin prisa y sin pausa) demolición de España. Hacen últimamente manifestaciones, cierto, pero siguen acordando comisiones y no derogan sus leyes, salvo las mínimas cuando Vox les empuja. Lo único que hay que acordar con el gobierno son elecciones para elegir unas cortes constituyentes que cambien o reformen Constitución, la Ley Electoral, el Cógido Penal y lo que haga falta, para acabar de una vez con la pesadilla nazionalista, por un lado, y hacer imposible la arbitrariedad gubernamental de un gobierno sometido a unos delincuentes y a la voluntad de poder de un tahur sin escrúpulos, por otro. Y no me quiero cabrear más, pues voy a comer y me puede sentar mal. P.D. A propósito del artículo: el progresismo buenista ha castrado moralmente a Occidente, no solo a España. Es parte de su proceso suicida. Llegará un momento en que no habrá refugios. Una de sus características del progresismo es que es imbécil y bobalicón respecto a otras culturas, o sus gentes (por ejemplo, el Islam), pero malo y represor respecto a lo mejor de lo propio (por ej. el cristianismo, el liberalismo político y económico, la libertad en general)
Kj26
El delito de odio..... Nuestros progres arriman a su ascua todo lo que creen que les conviene. Odiar es un sentimiento humano, tendríamos que dejar de ser humanos para dejar de odiar. Según la RAE: Odio es la 'Antipatía y aversión hacia algo o hacia alguien cuyo mal se desea.' Sanchez y su banda no quiere que demuestre públicamente 'la antipatía y la aversión' que siento a su desquiciada y muy dañina, al menos para mí, gestión gubernamental. He estado intentando asociar el muñeco a Sanchez y no he encontrado mas que un brazalete con las letras PSOE. El muñeco puede ser asociado a cualquier miembro del PSOE incluido a Sanchez. Qué el telediario abriera diciendo que ese era un muñeco de Sanchez, no indica más el grado de control y manipulación de los medios. Lo raro es que el telediario no hubiera puesto la imagen bica abajo para, además, decir que lo querían colgado por los pies. El grado de deterioro moral de Sanchez, el PSOE y su banda es de tal grado que causa pavor. Cuando cosas peores hicieron supuestos secesionistas a la imagen del Rey y a la bandera, qué opinaba el PSOE? Pues eso: 'consejos vendo que para mi no tengo'. Y ahora un poco mas en serio. El llamado delito de odio aquí, se conoce como 'delito de incitación al odio' en paises como UK, Irlanda, Suecia y en especial Alemania (Volksverhetzung). El 'Volksverhetzung' prohibe la incitación al odio contra un sector de la población, teniendo en mente al holocausto judío. Aquí, nuestros progres cogen el concepto, lo simplifican y lo aplican a lo que les da la gana, siempre en su beneficio. El muñeco podría a algunas personas a Sanchez, a otras al PSOE. En cualquier caso están en política administrando, dedicando los millones a lo que quieren, creando división, desigualdad, creando agravios por donde pasan. Y además, consideran muy dignos que 'no está bien' que los ciudadanos los odien. El hecho tiene otra lectura mucho más grave. En enero de 2024, odiar, odiar solo está permitido a quien Sanchez y su banda nos indiquen....
TELO186@MSN.COM
"...BOBERIA BUENISTA .....y repugnante moralmente añado yo , sr juan , ejemplo = cristina pardo ( la sexta ) , " ante un plato de tv lleno de terroristas con rifles , pistolas , explosivos y amenazando con la muerte ( ecuador ) ella , tan feliz y simpatica se refirio a ellos como " grupo violento " .
vallecas
El problema es la gente. D. Juan, el votante. Personas "decentes" en su día a día declaran que van a volver a votar a Sánchez. La única explicación es que están atrapados en una relación tóxica, como la de una mujer maltratada a diario por su pareja y no solo lo soporta, sino que lo defiende, lo cubre, lo justifica. Volver a votar a Sánchez es la degradación del individuo, de la sociedad en su conjunto. No quiero convivir con éstos y en caso de que sea un amigo o familiar me preocuparía por su salud mental y trataría de prestarle ayuda médica.