La declaración del que fuera 'número dos' de Interior durante el 1-O, José Antonio Nieto, afecta directamente al que fuera máximo mando policial de los Mossos d'Esquadra en el 1-O, José Luis Trapero. Durante su comparecencia como testigo en el juicio al 'procés', ha asegurado que el referéndum tuvo lugar porque la policía catalana no actuó para impedirlo y ha achacado la responsabilidad al major Trapero. La versión de Nieto se produce a las puertas del juicio que se celebrará en la Audiencia Nacional a este comisario, al que se le juzga por un delito de rebelión por no impedir la manifestación del 20 de septiembre de 2017 frente a la Consejería de Economía y la consulta del 1-O.
A los señalamientos de Nieto se suman otros miembros de Interior: el exministro Juan Ignacio Zoido y el coordinador del operativo policial del 1-O, Diego Pérez de los Cobos. "No tengo constancia de que los Mossos en ningún momento mostraran el más mínimo interés de evitar el referéndum", ha dicho Nieto ante las preguntas de las acusaciones y defensas en la causa del 'procés'. Además de señalar la actuación del Cuerpo autonómico, ha insistido reiteradamente en la actitud Trapero.
Ha señalado que el major parecía descontento con la orden de la Fiscalía y el Tribunal Superior de Cataluña de coordinar la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad con la de los Mossos de cara a la convocatoria de octubre. "La actitud de la dirección de los Mossos fue muy reacia a formar parte de esa coordinación y ejercerla realmente", ha añadido.
Las afirmaciones de Nieto tienen lugar 10 días después de que la Audiencia Nacional se considerara competente para juzgar a Trapero por no frenar la concentración del 20-S y el referéndum del 1-O. Con él, se sentarán en el banquillo de los acusados el exsecretario general de Interior César Puig, el exdirector de la policía autonómica Pere Soler y la intendente Teresa Laplana.
La semana pasada, el exministro de Interior Juan Ignacio Zoido también apuntó en su declaración como testigo la actitud de Trapero: "Parece que no era muy colaborador y que no le gustaba estar coordinado por Pérez de los Cobos".
Punto de inflexión
Para Nieto, el punto de inflexión se dio durante la Junta de Seguridad del 28 de septiembre de 2017, convocada por el propio presidente de la Generalitat Carles Puigdemont. Entonces, ha explicado, la confianza en los Mossos d'Esquadra "ya era mínima". La "alineación" de Trapero con el Govern era "total".
El ex número dos Interior ha esbozado ejemplos de algunas "excusas" planteadas por Trapero durante su gestión al frente de los Mossos. Ha asegurado que le preguntó al mayor si vería necesario el uso de la fuerza el 1-O. "Si hay niños y personas mayores, no", ha dicho que le contestó el jefe autonómico, lo que, a su juicio, se trató de una evasiva para evadir una futura intervención de su equipo en el referéndum.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional acusa al que fuera jefe de la policía catalana de diseñar de forma "deliberada" un dispositivo policial que impidió cumplir las órdenes de prohibir las votaciones del referéndum, por lo que pide para él una pena de 11 años de prisión por un delito de rebelión.
"Inoperativo e ineficaz"
A las alegaciones que Nieto ha presentado este lunes ante el Supremo se suma el informe que el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos, encargado de la coordinación policial del 1-O, presentó sobre la actuación de la Policía Nacional, la Guardia Civil y los Mossos d'Esquadra. Sobre este último, criticó su actuación durante los días previos y en la jornada del 1-O, su comportamiento en los colegios electorales y su indiferencia ante las agresiones a personal de la Guardia Civil.
En resumen, Pérez de los Cobos, que declarará este martes ante el tribunal, acusó a los Mossos de limitar su función a "mantener la seguridad ciudadana" como si de unas elecciones legalmente convocadas se tratara. "La ejecución del dispositivo policial de los Mossos resultó, cuando menos, inoperativo e ineficaz para el cumplimiento del mandato judicial", indicó.
