La tasa de letalidad de la Covid-19 todavía sigue siendo una de esas incógnitas por responder, aunque la comunidad científica cada vez está más cerca. Si bien al principio se pensó que se trataba de un virus como la gripe común, el número de fallecidos ha dejado en evidencia que el SARS-CoV-2 es un patógeno mucho más agresivo.
Por otro lado, las distintas tasas de letalidad de los distintos países genera aún más dudas, a pesar que según confirman fuentes médicas a Vozpópuli, todo apunta a que estas diferencias se deben más a la falta de consenso a la hora de recoger los positivos en los distintos países que al comportamiento del virus.
De acuerdo con uno de los últimos estudios publicados sobre la materia en The Lancet of Infectious Diseases, se estima que la tasa de letalidad del coronavirus a nivel mundial ronda el 0,66%. Esta cifra está muy por debajo de la registrada en los estudios científicos previos, ya que es uno de los primeros análisis en los que no sólo se tiene en cuenta el número de casos registrados, sino también una estimación de todos esos casos leves que nunca llegan a ser detectados por las autoridades sanitarias.
Aunque es mucho menor de la esperada, sigue siendo superior a la de la gripe común, que ronda el 0,66%. Cuando estos casos "sospechosos" no son tenidos en cuenta, la tasa de mortalidad a nivel mundial rondaría el 1,38%, una cifra más cercana a la registrada anteriormente.
Uno de los problemas que están notando los investigadores en general es las enormes diferencias que hay en cada país en términos de letalidad. Italia y España con un 11% y 8%, por ejemplo, cuentan con una tasa de letalidad mucho mayor a la de China, que ronda el 4%. Muchos miembros de la comunidad científica creen que estas tasas se tienen que coger con pinzas, ya que es muy difícil saber el número real de los contagios ante la enorme cantidad de casos leves o incluso asintomáticos que pasan desapercibidos.
Una de las tasas de letalidad que más dudas sugiere, más allá de la de China, es la de Alemania, una de las más bajas de los países afectados por el Covid-19. Desde las autoridades sanitarias achacan este fenómeno a una detencción pronta del brote gracias al testeo masivo y a que de media, los afectados por el virus en el país son más jóvenes.
No obstante, todavía existen dudas al respecto sobre el tamaño real de la epidemia en el país. Este martes, el director del Instituto Robert Koch (RKI), Lothar Wieler, ha asegurado que aunque se muestra optimista sobre la capacidad de controlar la epidemia de Alemania, cuenta con que la tasa de letalidad aumentará en las próximas semanas.
Esto implica que la letalidad de cada país depende no sólo del número de positivos, si no de las capacidades de diagnóstico que tienen los gobiernos para hacer pruebas de PCR y detectar casos de coronavirus, incluso sin son leves.
Han analizado más de 70.000 casos
En este estudio, los investigadores han intentado estimar realmente cuántas personas de todas las que se contagian -no sólo las que están lo suficientemente graves como para ir al hospital o someterse a una prueba PCR- mueren por culpa de la Covid-19. Para ello, los autores del estudio han analizado un total de 70.117 casos confirmados en laboratorio y diagnosticados clínicamente en China, combinados con 689 casos positivos entre personas evacuadas de Wuhan en vuelos de repatriación.
Por edades, las tasas de mortalidad varían sustancialmente, desde el 0,0016% en los niños de 0 a 9 años hasta el 7,8% en las personas de 80 años o más. El estudio ha observado también diferencias en las tasas de hospitalización por edad, que aumentan con la edad: se estima que el 11,8% de las personas de 60 años, el 16,6% de las personas de 70 años y el 18,4% de las personas de 80 años o más desarrollan síntomas lo suficientemente graves como para ser hospitalizadas.
Según este estudio, casi uno de cada cinco mayores de 80 años infectados probablemente requiera hospitalización, en comparación con alrededor del 1% de las personas menores de 30 años.
Teniendo en cuenta estas cifras, los autores advierten de que, sin medidas estratégicas, es probable que el número de personas que necesitan tratamiento hospitalario "sobrepase incluso los sistemas de atención sanitaria más avanzados del mundo", aunque puntualizan que, a medida que se desarrolle la pandemia, "es posible que los resultados mejoren y será importante revisar las estimaciones de este estudio".