España registró entre marzo y junio de este año 48.000 muertos más que la media en ese periodo de los cuatro años anteriores, lo que la convierte en el país de la Unión Europea (UE) con un mayor exceso de mortalidad en una etapa marcada por el brote y la primera ola de la pandemia de la covid-19.
Los datos publicados este lunes por Eurostat muestran además que, por provincias, Segovia registró el segundo mayor incremento de la UE en los fallecimientos con respecto a la media entre 2016 y 2019, con un pico de aumento del 634% a finales de marzo.
Las cifras de Segovia solo son superadas por Bérgamo, provincia del norte de Italia, de las primeras afectadas por la pandemia en el continente, que observó un incremento de los fallecimientos del 895% a mediados de marzo.
En total, en la UE se produjeron entre marzo y junio 168.000 fallecimientos por encima de la media registrada para el mismo periodo entre 2016 y 2019, una cifra que incluye todas las causas de deceso pero que "puede ser útil para evaluar los efectos directos e indirectos de la pandemia de la covid-19 sobre la población europea", según indicó Eurostat en un comunicado.
El nivel máximo de aumento se registró entre finales de marzo y principios de abril, con 36.000 muertes adicionales en una semana, mientras que desde principios de mayo este exceso de fallecimientos se situó por debajo de los 5.000 por semana.
Italia y Francia completan el podio
Por países, España fue seguida de cerca por Italia, que registró en ese trimestre 46.000 fallecimientos más que la media de los cuatro años previos; Francia, con 30.000 muertes adicionales; así como Alemania y Países Bajos, con 10.000 fallecimientos más en ambos casos.
En los 21 Estados miembros de la UE restantes se dieron, en total, 25.000 fallecimientos más en ese trimestre.
El golpe de la pandemia fue muy diferente no solo entre países, sino entre regiones europeas, con el centro de España y el norte de Italia como las áreas más afectadas, según Eurostat, que destaca los incrementos en Segovia y Bérgamo.
En todas las provincias españolas, con excepción de Lugo, se registraron entre 100 y 200 muertes más que la media de 2016 a 2019; y las peores cifras se dieron en Madrid, Ciudad Real, Albacete, Guadalajara, Salamanca, Soria, Barcelona y la ya citada Segovia, con más de 300 fallecimientos adicionales entre marzo y junio.
Los mayores de 70 años fueron los más afectados por este aumento de la mortalidad, representando el 96% de los fallecimientos adicionales (161.000 de 168.000).
Sin embargo, en total, este grupo de edad representó el 78% de todas las muertes registradas entre enero y marzo, solo ligeramente por encima del 76% de media entre 2016 y 2019.