Este miércoles, el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, desveló por fin cuántos rastreadores tiene la Comunidad de Madrid para hacer frente al estudio de contactos frente a los posibles brotes: un total de 182 profesionales, que contrastan con los 400 que prometieron desde su Gobierno cuando comenzó el proceso de desescalada.
En particular, en la región hay 182 personas que están dedicadas a labores de "rastreo" de los casos de coronavirus, de las que 142 son técnicos de Salud Pública y 40 están dentro del Centro de Atención al Paciente (CAP), según explicó ayer en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno.
"El problema no es que la Comunidad de Madrid no tenga rastreadores, es que adaptamos el equipo de rastreadores a las necesidades que vamos encontrándonos en el día a día", ha afirmado. En ese sentido, Aguado aseguró que si fuera necesario aumentar el número de rastreadores por un incremento de casos de coronavirus, se reforzará el número de profesionales en proporción.
En ese sentido, insistió en que Madrid es la región española en la que se han hecho más pruebas PCR en los últimos tres meses, con más de 800.000. "Seguramente por esto y por otras razones en Madrid estamos capeando mejor esta segunda ola del covid-19 que en otras regiones", según el vicepresidente regional, quien, no obstante, se ha mostrado "prudente" porque "en cualquier momento puede haber un brote descontrolado".
Los expertos temen que haya brotes sin detectar en Madrid
Por otro lado, el vicepresidente de la CAM también ha hecho referencia a las críticas de muchos expertos, que alegan que es más que probable que en Madrid se estén produciendo brotes pero no estén siendo detectados debido a la falta de rastreadores. El político afirmó que si alguien tiene pruebas de "falseo" de los datos de contagios de coronavirus en la región madrileña, "que las presente, que las demuestre y que nos dejen trabajar -ha afirmado-".
El médico Bonaventura Clotet, del Hospital Germans Trias i Pujol, dijo que Madrid "no está diciendo toda la verdad", mientras que el epidemiólogo Antoni Trilla, del Clínic de Barcelona, cuestionó que los rastreadores madrileños fueran suficientes para asegurar que "la situación de pocos casos sea la real".
