Dice Enrique Ruiz Escudero (Madrid, 1967), consejero de Sanidad de una comunidad que sufre la pandemia del coronavirus como ninguna otra en España, que si algo aprendió de la emergencia sanitaria fue la capacidad y la velocidad de tomar decisiones -antes muy condicionadas, precisa- ante una realidad muy cruda y un virus "que nunca nos ha dado ni media alegría".
Más de seis meses después de la explosión de la epidemia, el consejero se muestra cauto cuando se le pregunta por los datos de una región que, tras un breve respiro a comienzos de verano, vuelve a encabezar las estadísticas en número de positivos. Considera que la situación en la comunidad "está controlada" y los datos recabados en los hospitales hablan de estabilidad.
El consejero de Sanidad de Madrid recibe a Vozpópuli justo antes de reunirse -de forma telemática- con los gerentes de los hospitales de Madrid. Un encuentro que le dará el pulso de lo que está sucediendo en una comunidad que concentra casi un tercio de todos los positivos por la covid-19 del país. Un aumento de casos que mantiene a la Consejería en alerta y que ha obligado a la comunidad a adoptar un nuevo paquete de medidas en su lucha contra la pandemia, que entran en vigor el lunes como restringir las reuniones a un máximo de diez personas o reducir -del 75% al 60%- los aforos en bodas o velatorios.
Sanidad ha previsto duplicar el número de rastreadores en la región de 560 a 1.110 para el seguimiento de positivos y contactos o comprar dos millones de pruebas rápidas de antígenos para agilizar el diagnóstico de casos. Medidas que, asegura el consejero, se irán revisando de forma constante. El objetivo es frenar la expansión del virus en una región que, con datos del viernes, vuelve a ser la comunidad más afectada con 3.245 positivos más -un 30 % del total-, de los que 1.462 fueron confirmados el jueves, y también es la que presenta la cifra más alta de defunciones, con 94 producidas en los últimos 7 días.
Lo primero es hablar de los datos. ¿Cuál es la situación de Madrid en estos momentos?
Desde el punto de vista epidemiológico, estamos en una fase de detección de casos al día aproximadamente igual que la semana pasada, en torno a los 1.500 casos diarios y con una situación asistencial sobre unas 1.880 camas de hospitalización (ocupadas por pacientes covid) y en UCI estamos sobre las 220/225 camas ocupadas. La presión en Urgencias está más o menos mantenida, un poco mayor que en agosto, pero no mucho más y en Atención Primaria es donde sí hay más casos. Casi el 35% dela actividad que tiene primaria está asociada a covid. Diría que seguimos manteniendo el número de casos, pero que es una situación controlada, siempre dicho con prudencia, y de cierta estabilidad. Vamos a ver ahora el comportamiento con esta operación retorno.
Usted asegura que la situación está controlada. ¿Qué le dicen desde los hospitales de la Comunidad?
Antes ingresábamos el 80% de los pacientes que diagnosticábamos, ahora estamos por debajo de un diez. Lo que nos tiene que hacer valorar cómo se está comportado la pandemia, independientemente de la capacidad diagnóstica, que es muy buena y está muy bien diagnosticar mucho para detectar asintomáticos y cortar las cadenas de transmisión, es ver que la parte asistencial se mantiene estable. Ahora estamos en un 12% de hospitalización y por debajo del 8% en UCI. Los datos de hospitales nos cuentan cosas de cómo se va comportando la pandemia. Por ejemplo, el primer hospital que dio la alarma de que estábamos subiendo de casos fue el Hospital de Móstoles, que tuvo que suspender parte de su cirugía de tarde y este lunes retomó esa cirugía y está descendiendo en camas de hospitalización de covid. Es un dato que indica que estamos en una situación distinta a la del mes de julio, que es cuando empezamos con el aumento de contagios. Sí, a día de hoy tenemos una situación controlada.
"Madrid tiene dos factores que condicionan: la alta densidad de población en la capital y toda su área metropolitana y, otra, la movilidad, la interna y la que viene fuera"
¿Por qué se han disparado las cifras de contagios en Madrid? ¿Qué ha sucedido?
Es verdad que el número de contagios es alto, pero también el número de pruebas que se realizan. La semana de máximo número casos durante la pandemia, hicimos 15.000 PCR. Ahora hacemos 150.000 a la semana. Hemos multiplicado por 10 nuestra capacidad diagnóstica. Además, Madrid tiene dos factores que condicionan: la alta densidad de población en la capital y toda su área metropolitana y, otra, la movilidad, la interna y la que viene fuera, como Barajas o la red de AVE. Tener alta densidad, con mucha movilidad, es lo que favorece la transmisión y, desde el punto de vista del control de la pandemia, es un inconveniente. Son casi siete millones de personas que se mueven todos los días. Eso requiere decisiones distintas con respecto a otras comunidades. Y, sobre todo, que las decisiones que tomemos en cuanto a restricciones en todos los ámbitos siempre sean fruto del análisis. No es lo mismo una decisión en Castilla-La Mancha o Castilla y León que en Madrid. Lo más parecido podría ser Barcelona y su área metropolitana. Es verdad que hemos empezado más tarde -alude a los rebrotes- y parece que estamos controlando más pronto. A ver si continúa en esa línea.
¿Que han visto en estas últimas semanas? ¿Dónde se sitúa el origen de los rebrotes?
Aquí lo que hemos detectado es que el 80% de los rebrotes, de los ciento y pico que hemos tenido, son en el entorno familiar y social. Quizá se haya producido una relajación. Por eso las medidas que hemos anunciado van en esa dirección. En nuestra anterior orden una medida importante era la recomendación de que no se realizasen reuniones de más de diez personas. Ahora ya tiene rango de prohibición. Es importante que se sepa que las medidas que se toman no son para penalizar, son para contener al coronavirus. De poco vale que uno use mascarilla en el transporte o el trabajo, si se relaja en casa. No es una labor fácil.
Hablaba antes de la operación retorno. El arranque del curso escolar es una de las mayores preocupaciones.
Hemos realizado un trabajo directo con la Consejería de Educación e intentado dar el entorno más seguro dentro de esa vuelta al colegio en el escenario epidemiológico que teníamos. Estamos trabajando con ellos desde junio. Planteamos cuatro escenarios: de vuelta presencial con covid, vuelta semi-presencial con covid y situación epidemiológica complicada, no presencial o libre de covid. Nosotros planteamos un escenario de vuelta presencial en un primer momento, cuando comenzaron a bajar el número de casos, pero llegó la mala sorpresa de que se ha producido un aumento. Valorando esa situación, a mediados de agosto, optamos por tomar decisiones y aportar por el escenario dos (vuelta semi-presencial) y a partir de ahí, queremos la máxima seguridad. Lo que se ha hecho es determinar pruebas a los profesores y establecer un sistema más presencial en etapas tempranas y semi-presencial a partir de 3º y 4º de la ESO. Además de las medidas anunciadas por la presidenta Ayuso que tiene muy claro que quería dar un horizonte de certeza en esa vuelta. Tenemos que aprender a convivir con la máxima seguridad.
Por cierto, en cuanto a las pruebas de los docentes, se ha criticado que sea una empresa privada, Ribera Salud, la que se adjudique el contrato. También el caos de organización.
Ribera Salud ya tenía experiencia con los test que se realizaron en Torrejón de Ardoz y ahora está haciendo con Educación esas pruebas a los profesores por una cuestión de emergencia. Ahora mismo toda la actividad diagnóstica nuestra (laboratorios públicos) está en la parte asistencial y ahí la Consejería de Educación tomó la decisión de hacerlo con Ribera Salud, que es acertado. No deja de ser hacer 100.000 pruebas a los profesores antes de empezar el colegio. Respecto a la organización, el primer día hubo un problema de coordinación en uno de los centros donde se hacían las pruebas; se convocó más gente de la que se tenía capacidad. Pedimos disculpas. Lo importante es que se hacían pruebas para saber el grado de inmunidad de los profesores de cara a la vuelta y ahora es importante valorar los resultados.
Entre las nuevas medidas anunciadas por su Consejería para contener la pandemia está realización de dos millones de test rápidos. ¿Cómo serán?
Es un test de antígeno que se hace con saliva. Tiene la ventaja de que es más fácil de poder realizar la prueba y, en segundo lugar, de la velocidad del resultado. En diez o quince minutos, sabemos si un paciente está contagiado o no. Se podrá utilizar en Urgencias de hospitales o en Atención Primaria. Ahí ganas mucho tiempo y agiliza mucho la decisión que se va a tomar en cada centro sanitario de cara a qué se hace con ese paciente.
En diferentes ocasiones ha mencionado el trabajo en Atención Primaria. Sus profesionales llevan meses quejándose de que no han llegado los refuerzos prometidos.
Es verdad que en agosto, fruto del crecimiento de número de casos, se han juntado varios factores. Principalmente, hay un problema de recursos humanos respecto a los médicos. Primaria un porcentaje alto de médicos adaptados, que son los mayores de 60 años que no pueden estar atendiendo pacientes covid; luego los que han estado de merecidas vacaciones y luego los que están de baja. Con esos tres frentes y un crecimiento de casos importante, la situación es complicada. En breve, presentaremos un plan de acción específico para Primaria con decisiones en cuanto a las medidas retributivas de los médicos y que permita que Primaria sea atractivo también para médicos que están en el entorno hospitalario o trabajando en otro frente. Empezaremos por una oferta retributiva mejor y, a partir de ahí, tomaremos las decisiones organizativas.
"Nos sentó mal lo que dijo el presidente de Castilla-La Mancha. Es como tratar de estigmatizar a Madrid y generar alarma"
¿Qué puede contar del nuevo hospital que se está contruyendo en Valdebebas? ¿Con qué personal se dotará ese nuevo centro sanitario de emergencia?
El Hospital Isabel Zendal va a muy buen ritmo. Se están cumpliendo los objetivos para que en otoño esté operativo. Es un hospital para dar salida a situaciones de emergencia, más flexible en su concepción. Que permita realizar derivaciones, con un criterio muy concreto y descongestionar los hospitales tradicionales. Va a haber un equipo más estable de activación, pero un poco el modelo será el de IFEMA con equipos de activación de los distintos hospitales según la situación. Por ejemplo, ahora hospitales como el Gregorio Marañón y 12 de Octubre están en torno a 200 hospitalizados por covid (son los centros sanitarios madrileños que concentran más casos). Si este hospital de emergencias estuviera activado a lo mejor podrían haberse producido derivaciones desde esos centros. Hay que darle todas las posibilidades pensando en la funcionalidad que debe tener cuando no haya covid.
¿Cómo le han sentado las declaraciones del presidente de Castilla-La Mancha diciendo de Madrid que era una "bomba radiactiva vírica"?
Nos sentó mal. Es como tratar de estigmatizar a Madrid. Asistimos perplejos a esa hostilidad. Somos conscientes de la situación de Madrid, por lo que he dicho antes, por su densidad de población, por su movilidad y porque el virus no entiende de fronteras con ninguna comunidad autónoma. Pero fue una declaración desacertada. Sin ningún sentido. La colaboración que hemos tenido siempre con Castilla-La Mancha ha sido total, a todos los niveles. Durante la pandemia y antes de la pandemia. Este tipo de declaraciones es poner en el punto de mira a los madrileños y generar alarma. Está fuera de tono. Luego ha pedido disculpas, diciendo que no es lo que quería decir. Pero es que estamos demasiado acostumbrados a que cada vez que dicen algo de Madrid luego no es lo que querían decir. Pues que no lo digan, que es lo mejor.
¿Secunda lo que dice la presidenta Díaz Ayuso de que se está produciendo un ensañamiento con la Comunidad?
Estamos notando que permanentemente a todos los niveles es así. Por parte del presidente del Gobierno o de Fernando Simón. Es verdad que no sucede lo mismo con el ministro Salvador Illa. Mi relación personal con él es buena, aunque a veces no coincidimos en cómo se están llevando las cosas desde el Ministerio, pero tenemos que tener buena relación.