La multinacional catalana especializada en hemoderivados Grifols estima que la covid-19 generará un agujero de 200 millones de euros en sus cuentas de 2020, según acaba de comunicar la compañía este lunes en un escrito remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Según ha informado la empresa, planea poner en marcha un plan de recortes de "gastos operativos no estructurales" por un valor de cien millones de euros, con el objetivo de mitigar el impacto negativo que ha dejado tras de sí la pandemia. Desde Grifols aseguran que no afectará a la cifra de ingresos ni al empleo de la compañía.
El éxito de su test de detección del virus
La empresa es una de las pocas españolas que ha logrado sacarle ventaja a la enfermedad, a pesar de este impacto negativo. A principios de mayo, anunció que había desarrollar con éxito un test molecular para detectar el coronavirus y hasta cuenta con la aprobación de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).
El test por el que ha apostado Grifols no es ni de PCR ni de anticuerpos, que son los que más conocemos, sino que se trata de un test molecular basado en una tecnología conocida como TMA (Amplificación Mediada por Transcripción) y permite detectar el virus SARS-CoV-2 a través de muestras de sangre o de líquido respiratorio. Esta técnica también se basa en la detención del ARN del virus, igual que ocurre con las tradicionales PCR.
Según garantizan desde la compañía, este tipo de pruebas diagnósticas permiten la detección del virus SARS-CoV-2 "con una sensibilidad equivalente o incluso superior a otros test moleculares, disponibles actualmente, como los basados en PCR". Por otro lado, también está colaborando con varios hospitales españoles para analizar el impacto que puede tener el uso de plasma obtenida a partir de la sangre de pacientes curados como tratamiento contra el coronavirus.