Era el día más esperado por Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid: la inauguración del Hospital Isabel Zendal. El flamante nuevo centro de emergencias será pionero en España y referente para Europa, destacó la presidenta regional en un acto en el que decenas de sanitarios protestaron por lo que consideran una mega estructura innecesaria. "No es ni un hotel medicalizado. Es un hangar vacío", critican. Los sindicatos vuelven a oponerse a los traslados forzosos desde otros centros sanitarios. De momento, el centro arranca con un centenar de profesionales, en concreto 106. Sólo catorce médicos se han presentado como voluntarios para irse a Valdebebas.El 1 de diciembre de 2020 estaba marcado en el calendario de la agenda política madrileña como una fecha clave. El pasado junio, con España comenzando a salir del abismo tras la brutal embestida de la primera ola del coronavirus, la presidenta regional anunciaba que Madrid -epicentro de la pandemia en España y hoy arrojando cifras mucho que le sitúan entre las comunidades con menor incidencia- contaría con un nuevo hospital de emergencias ubicado en Valdebebas. Ahora, el Hospital Isabel Zendal -que lleva el nombre de la enfermera gallega que protagonizó una de las más importantes gestas de la historia- es una realidad. En apenas unos días, comenzará a recibir a los primeros pacientes en el pabellón 2, que cuenta con 240 camas de hospitalización.Un macro recinto hospitalario de 80.000 metros cuadrados -con 3 pabellones de hospitalización de 10.000 metros cuadrados cada uno, con 1.000 camas, la UCI más avanzada de Madrid, equipado con tecnología de última generación...- que durante más de hora y media, las autoridades madrileñas, arropadas por el presidente del PP, Pablo Casado, visitaron recibiendo explicaciones detalladas sobre su organización y dotación.
El emblema de la lucha contra el virus
"El hospital es la representación del esfuerzo, la perseverancia y la lucha de una región contra el virus", aseguró Isabel Díaz Ayuso en el discurso inaugural del centro de emergencias. Un hospital pionero en España y sin precedentes en Europa, destacó porque no existe ningún hospital de emergencias de uso permanente de esas características.Por eso, la presidenta regional no entiende las críticas a la apertura de un centro que será referente a nivel internacional. "Yo lamento las críticas. Estamos en la Comunidad de Madrid para salvar vidas y un gran hospital público no puede ser una mala noticia para nadie, a no ser que el sectarismo político lo vea así", señaló la máxima responsable de la Comunidad en el acto, al que no acudieron ni el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ni otros responsables sanitarios de la Comunidad.
Protestas de sanitarios
Críticas como las que se vertieron esta misma mañana a las puertas del hospital en el solemne acto inaugural. Convocados por la Asociación Madrileña de Enfermería (AME), el Movimiento Asambleario de Trabajadores-as de Sanidad (MATS), SUMMAT y Juntas x la Pública, un numeroso grupo de sanitarios mostraron su disconformidad con la apertura de un nuevo centro que, desde el anuncio de su construcción, vieron con recelo. Al grito de "Ayuso, dimisión", escenificaban su oposición a la apertura de un recinto que, insisten, no es necesario en una comunidad donde hay instalaciones sanitarias infrautililizadas."Llevarse ahora mismo a profesionales a un hospital que no es un hospital lo que va a provocar es que las listas de espera, que ya eran elevadísimas antes de la pandemia, ahora sean descomunales. Hablamos de pacientes crónicos, gente esperando para ver a un especialista hasta tres años. No podemos permitirnos que, en vez de poner a trabajar la máquina de la sanidad pública y pagar a profesionales, se abra este hospital. No es ni un hotel medicalizado, es un hangar vacío", señala a Vozpópuli Alda Recas, presidenta de AME tras asistir a la concentración.Los sindicatos insisten: el hospital se abrirá con apenas un centenar de sanitarios -en concreto 106- que son los que se han adscrito de forma voluntaria para trasladarse a Valdebebas. Ya la pasada semana, desde las organizaciones sindicales informaban que el centro tenía un problema de personal para su apertura: sólo 111 sanitarios -una semana después son 106- de los 669 profesionales voluntarios, fijos o interinos de los 31 hospitales regionales que se habían pedido desde la Consejería de Sanidad, se han presentado como voluntarios. La cifra incluye médicos, enfermeras, TCAEs (Auxiliares de Enfermería), celadores y técnicos de unidades administrativas.En los mismos días, la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM) mostraba su preocupación porque el nuevo hospital de la Comunidad de Madrid se pondrá en marcha sin estos especialistas. Algo a lo que oponen radicalmente. "No es seguro para los pacientes ni da un mínimo de calidad si no hay radiólogos supervisando todas las fases del proceso asistencial", aseguran desde la sociedad científica.
14 médicos voluntarios
Este mismo martes, a primera hora de la tarde, finalizaba una nueva reunión de la Mesa Sectorial de la Sanidad para abordar qué profesionales se ocuparán de atender a los primeros pacientes en el centro. El secretario general de la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (Amyts), Julián Ezquerra, informaba que sólo 106 voluntarios se han adscrito para irse a Valdebebas, de los que diez son facultativos, más otros cuatro médicos de urgencias hospitalarias. Es decir, un total de 14.El resto, añadía Ezquerra, se cubrirán con "traslados forzosos de los contratos covid. En primer lugar, si hay voluntarios de estos contratos se les dará opción de ir. Y, si no los hay, se adscribirán de forma forzosa utilizando como criterio un reparto proporcional entre los distintos hospitales y, como criterio de selección, el más moderno o el de menos antigüedad de los contratos covid, contando el total de la antigüedad en el centro, no sólo del contrato covid".
Un hospital de apoyo
El Isabel Zendal, según explicó en rueda de prensa hoy mismo el consejero de sanidad madrileño, Enrique Ruiz Escudero, empezará a recibir enfermos la próxima semana. Inicialmente serán esos sanitarios voluntarios quienes les van a atender. El consejero insistió en el mensaje que se ha ido lanzando estos días: el papel del nuevo centro es el de "hospital de apoyo" de los otros centros de la Comunidad. Para que éstos retomen la actividad con pacientes no covid, tan ralentizada en los últimos meses.El consejero aseguró que el hospital va a contar siempre con el personal suficiente y que éste variará en función de las necesidades. La idea es ir trasladando al Zendal al personal que requieran de entre los 11.324 sanitarios contratados específicamente para luchar contra el coronavirus.
Mala planificación
"Pretenden llenar un hospital con profesionales de otros hospitales. Ya antes, las ratio enfermera-paciente eran inadecuadas para el buen cuidado de estos enfermos que pueden derivar de leves a graves en poco tiempo. Pretenden que de manera voluntaria los profesionales vayan a este mega-hangar y desde AME nos oponemos a esa planificación de recursos humanos", señala Alda Recas."Desde el punto de vista de la planificación no lo han hecho de forma eficiente. Había otras posibilidades antes de gastarse 50 millones en un principio y 100 al final. Como instalaciones anexas a otros hospitales de la Comunidad para tener cerca el hospital principal; no un centro alejado y sin recursos. No es la opción que necesitaba Madrid en una segunda ola de la pandemia", concluye Recas.