Uno de los puntos claves de la rueda de prensa diaria que da el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, han sido los primeros resultados del estudio de seroprevalencia, presentados a última hora de la tarde de ayer. Según las conclusiones preliminares del estudio, tan sólo un 5% de los españoles ha superado la enfermedad, lo que supone en torno a 2,3 millones de ciudadanos.
Para Simón, los resultados eran algo esperado y cierta medida, suponen una buena noticia. "Si hubiéramos tenido incidencias mucho mayores, eso habría implicado que la letalidad, el número de afectados y el colapso de los sistemas sanitarios habría sido muchísimo mayor", ha explicado. No obstante, implican que estamos muy alejados de la protección natural que habría implicado la famosa inmunidad de rebaño.
La realidad es que el estudio ha dejado de relieve que la tasa de letalidad del virus es mayor de la esperada: causa un fallecido por cada 100 infectados. Por otro lado, Simón ha reconocido que la inmensa mayoría de los casos han pasado sin ser detectados. "Es cierto que apenas hemos detectado en torno a un 10% del total de los casos que había en España", ha explicado.
No hay inmunidad de grupo
Al ser preguntado sobre qué implica que el 95% de la población siga siendo susceptible al virus, Simón ha explicado que la variabilidad geográfica no juega ningún papel. Mientras que la Comunidad de Madrid registra en torno a un 11,3% de inmunidad, regiones como Galicia apenas llegan al 3%. No obstante, a al hora de registrar rebrotes, ninguna de las autonomías cuentan con tasas equivalentes al 60%, el mínimo necesario para la famosa inmunidad de grupo.
"Por supuesto, si tuviéramos a toda la población vacunada el rebrote sería imposible, pero mientras tanto, un posible rebrote no va a depender de la tasa de seroprevalencia, sino de los prudentes que seamos todos a la hora de mantener las medidas de seguridad", ha explicado, insistiendo en que la responsabilidad individual de la ciudadanía y llevar a cabo una desescalada paulatina resulta esencial para evitar importantes repuntes.