La lluvia de críticas a la reforma de la Ley del Aborto planteada por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, no cesa. Al batallón de disidentes dentro del propio Partido Popular, con el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez-Feijóo, y la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, como principales detractores, se ha sumado la reciente preocupación de la ministra de Sanidad francesa, quien ha solicitado una reunión con su homóloga española, Ana Mato.
El último en mostrar su malestar ha sido el periódico francés Le Monde advirtiendo de que "Rajoy comete un grave error al convertir (el derecho de las mujeres a decidir libremente) en un instrumento de reconquista ideológica".
En un editorial titulado "Aborto: la regresión española", el rotativo galo lamenta la involución que está sufriendo España, quien "en su día llevó la voz cantante en materia de derechos de las mujeres", después de que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero pusiera en práctica en 2004 "una auténtica paridad en el Gobierno" y aplicara "una de las políticas más progresistas de Europa en la lucha contra la plaga de violencia machista".
"Si hoy España reivindica un papel pionero en derechos de las mujeres, es por su regresión", critica 'Le Monde', añadiendo que el Ejecutivo de Mariano Rajoy va a contracorriente puesto que 20 de los 28 Estados miembros de la Unión Europea reconocen el derecho de las mujeres a decidir libremente sobre su embarazo en el periodo comprendido entre las 12 y las 14 primeras semanas; otros seis establecen condiciones y sólo dos, Malta e Irlanda, lo prohíben.
'Le Monde' concluye su editorial sobre el anteproyecto español, que no contempla entre los supuestos para abortar la malformación del feto, criticando que es una iniciativa de tipo ideológico que "no está fundada en ninguna justificación de salud pública, puesto que el número de abortos en España disminuyó en 2012".