El cine y el tirón que aportan algunos de nuestros actores más reconocidos en Hollywood, entre los que no se puede dejar de incluir a la oscarizada pareja formada por Penélope Cruz y Javier Bardem o al malagueño Antonio Banderas, están "obligando" a que el paraíso cinematográfico "se ponga las pilas" con el español, según informaba ayer la edición on line de 'Wall Street Journal', nada menos que en su apertura.
El propio Pedro Almodóvar fue homenajeado el año pasado por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Hollywood después de que le galardonaran con un Oscar a la Mejor Película Extranjera por el filme Todo sobre mi madre y Hable con ella, en la categoría de Mejor Guión Original.
En los últimos años, los hispanos se han convertido en buenos clientes para Hollywood. Tanto es así, que algunas compañías cinematográficas optan por filmes en los que los diálogos son en español y sin subtítulos en inglés, según el periódico estadounidense.
Se trata de un hecho que no extraña si se tiene en cuenta que este colectivo representa el 25 por ciento de las entradas de cine vendidas en Estados Unidos en 2012. Además, el espectador latino vio una media de 10 películas al año frente a las 6 de blancos, afroamericanos y asiáticos-americanos.
Dice el 'WSJ' que la base de 'fans' latinos está empezando a cambiar la forma en la que Hollywood gasta su dinero, desde labores de producción y marketing hasta la renovación de cines. Y parece que no les falta razón cuando "Fast & Furious 6" se estrenó liderando la taquilla con 117 millones de dólares, de los que un 33 por ciento procedieron de bolsillos hispanos.
Los estudios se vienen gastando una media del 5% de su presupuesto para marketing en cintas cuyo idioma sea el español, por encima del 1% de hace una década. Y es que Hollywood está empezando a reconocer el valor de la publicidad que aportan algunos de los actores más populares en la comunidad latina.