Las mujeres ganan actualmente un 24% menos que los hombres y sólo ocupan el 25% de los cargos administrativos y directivos, pese a que su contribución al trabajo mundial es del 52%, según el Informe de Desarrollo Humano 2015 de Naciones Unidas. El estudio, presentado este lunes en Adis Abeba, también subraya que el 32% de las empresas no tiene a ninguna mujer entre sus cargos directivos superiores, y que tan sólo ocupan el 22% de los escaños de los parlamentos nacionales.
Las mujeres sufren desventaja en ambos mundo laborales: en el remunerado predominan los hombres, en el no remunerado -fundamentalmente el trabajo de hogar- lo hacen las mujeres, que ven así limitadas sus posibilidades de elección. Además, según este informe, las mujeres realizan 3 de cada 4 horas de trabajo no pagado, en cambio, a los hombres les corresponden 2 de cada 3 horas de empleo remunerado.
Dado que las mujeres asumen normalmente el cuidado de los miembros de la familia, el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) advierte de que es probable que estas desigualdades se intensifiquen a medida de que la población envejezca. Para reducir esta desigualdad, la sociedad necesita nuevas políticas con paridad salarial y permisos parentales remunerados, apuntó la administradora del PNUD, Helen Clark, durante la presentación. Por otra parte, el informe, titulado Trabajo al servicio del Desarrollo Humano, señala que 830 millones de trabajadores pobres en el mundo que viven con menos de 2 dólares al día.
Las mujeres realizan 3 de cada 4 horas de trabajo no pagado, y en cambio, a los hombres les corresponden 2 de cada 3 horas de empleo remunerado
74 millones de jóvenes, sin trabajo
Más de 200 millones de personas, entre ellas 74 millones de jóvenes, están desempleadas, y 21 millones más realizan trabajos forzosos. Según la Organización Mundial del Trabajo, el 61% de las personas empleadas en el mundo trabajan sin contrato, y sólo el 27% de la población mundial cuentan con protección social contra el desempleo.
El informe señala el "crecimiento verde", es decir, la economía ligada a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, como la principal oportunidad de empleo y fuente de transformación de algunos trabajos. Como ejemplo, señala que se necesitarán cerca de 45 millones de trabajadores sanitarios adicionales para cumplir con los objetivos mundiales de desarrollo en materia de salud.
La globalización y los cambios tecnológicos están generando un mundo cada vez más polarizado en el que muchos trabajos de tipo rutinario -como los administrativos- tienden a desaparecer o ser sustituidos por ordenadores, y en el que cada vez existe menos seguridad.