Este jueves se celebraba en Haifa, Israel, la segunda edición de un concurso que algunos han tildado de macabro: Miss Superviviente del Holocausto, un certamen en el que afirman que no se premia únicamente la belleza, sino también el carácter de la persona y su trayectoria en la vida.
El evento es organizado por un grupo israelí que ayuda a los cerca de 200.000 supervivientes de la barbarie nazi que viven en Israel. "Nunca debemos perdonar y olvidar lo que pasaron, pero encontré esta forma muy constructiva para mostrar que esta gente es hermosa", decía en su estreno Shimon Sabag, director del grupo organizador.
En la edición de 2013, la vencedora ha sido Soshana Colmer, una participante de 93 años que nació en la República Checa y que pasó por los campos de exterminio alemanes.
Un año antes, en la edición pionera de este espectáculo, la corona fue para Hava Hershkovitz, una rumana de 80 años que recordó ante los medios los tres largos años que permaneció en uno de los campos de concentracion levantados en el territorio la antigua Unión Soviética
En esa ocasión, Colette Avital, presidenta de la unión de los más importantes grupos de sobrevivientes del Holocausto, se declaró en contra de este concurso y lo calificó de “absolutamente macabro”: “Maquillar y poner bonitos vestidos a estas supervivientes no es precisamente lo que las va a llenar de vida", declaró según una publicación del diario británico The Independent.