En espera de que la candidatura revele esta semana sus cuentas definitivas, el Consistorio, principal impulsor del tercer y fracasado intento, sigue retribuyendo a personas ligadas a la carrera olímpica: Gómez-Angulo, Chapman, Villalonga, Del Amo… “¿Qué piensa hacer la alcaldesa con esa ‘Santísima Trinidad’?”, protesta Gabi Calles (PSOE). 

Ana Botella ‘ficha’ a Kami Rashidi, un ‘conseguidor’ de turbio pasado relacionado con jeques emiratíes que busca compradores para la Caja Mágica, el Madrid Arena… instalaciones de última generación pero carísimas y con una rentabilidad casi inviable. “Esperamos que al Ayuntamiento no se le ocurrirá malvender patrimonio”, advierten los socialistas madrileños.