Los estragos que está causando en la economía del país el prolongado desplome del precio del petróleo no tendrán repercusiones negativas en los ambiciosos proyectos de transportes que ha puesto en marcha el Gobierno saudí, en el que participan grandes empresas españolas como OHL, ACS, FCC, Talgo, Indra y Renfe. El ministro saudí de Transportes ha negado que vaya a haber cambios en los plazos previstos para obras como el AVE a La Meca y el metro de Riad.

Arabia Saudí se va a consolidar como uno de los centros mundiales de las infraestructuras, mucho más allá del contrato de la línea de alta velocidad entre La Meca y Medina. En los próximos meses se ponen en juego más de 55.000 millones de euros en licitaciones, con especial incidencia en el metro de Riad, por el que pujará FCC, y en la construcción de una nueva ciudad conocida ya como la ‘nueva Meca’.

Arabia Saudí acaba de poner en marcha un nuevo proyecto de infraestructuras después del eterno proceso de adjudicación del tren de alta velocidad entre La Meca y Medina. Como entonces, las compañías españolas tendrán una nueva oportunidad de hacer negocio en Oriente Medio con la licitación de las dos primeras líneas del metro de Riad, la capital del país petrolero por antonomasia.