El absentismo laboral, que se sitúa en niveles récord desde la pandemia, cuesta a las empresas más de 135.000 millones de euros al año, según Cepyme. Según sus cálculos, el 7% de la jornada no se trabaja, un porcentaje estable desde la crisis sanitaria, fundamentalmente por la incapacidad temporal, y dentro de ésta, por contingencias comunes.

"El absentismo es un grave problema para la pyme española. Creció en la pandemia, del 5% al 7% y se queda sistemáticamente en ese 7% desde entonces, no baja", ha alertado Gerardo Cueva, presidente de Cepyme, este jueves.

Entre las causas del absentismo justificado, Ángel Nicolás, vicepresidente de Cepyme, ha destacado la saturación del servicio público de salud y el aumento de las listas de espera. En cambio, el envejecimiento poblacional "no es una de las causas", pues el mayor absentismo se da entre los trabajadores de entre 16 y 45 años, según la patronal.

Finalmente, el presidente de Cepyme también ha destacado que "los permisos retribuidos" para conciliar, con la "incesante" prolongación y aprobación de otros nuevos y que "van siempre a las espaldas de la empresa", es inconcebible y también está afectando a este absentismo laboral.

El absentismo: más de un millón de trabajadores faltan cada día

1,3 millones de personas faltan a su trabajo cada día de forma justificada, al estar de baja por incapacidad temporal (IT), sobre un total de 19 millones de asalariados. En 2019, antes de la crisis sanitaria, eran unas 700.000 personas; es decir, prácticamente se han duplicado, según datos de Randstad Research.

"Casi el 5% de las horas se pierden por bajas médicas, se ha duplicado en una década la proporción en España", ha destacado Valentín Bote, director de Randstad Research. "La explicación tiene que venir o porque hay más casos de baja o porque las bajas son más largas. Ambas cosas están sucediendo", ha dicho.

Desde la patronal de la pequeña y mediana empresa han alertado de las consecuencias de este absentismo: falta de trabajadores para cubrir al trabajador y, por tanto, la menor producción. Pues el absentismo se suma a otro problema: según sus cálculos, en España hay casi medio millón de vacantes que no se cubren, afectando a la productividad.

Luis Miguel García, vicepresidente de AMAT, ha destacado el registro de bajas los lunes y ha destacado el "verdadero problema organizativo" de las bajas cortas, porque las empresas no tienen manera de cubrir el trabajo. En su opinión, "empieza a haber un cierto uso abusivo de las bajas cuando alguien, pudiendo estar en condiciones de trabajar, lo alarga de manera asistida por los servicios de salud".

Por tipo de enfermedad, de los 5,6 millones de procesos iniciados en las mutuas por contingencia común, el primero son enfermedades del sistema osteo-mioarticular y el segundo son las enfermedades mentales. Estas últimas, con un aumento del coste del 118% en cinco años, según AMAT.

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