Tras el varapalo de ERC en el 12-M, los republicanos reconocen el mensaje claro de la ciudadanía con el proyecto fallido de una Cataluña independentista y republicana. Un reconocimiento que ya se ha cobrado la primera 'baja', con el paso atrás de Pere Aragonés, y que sume al partido en una profunda reflexión y sitúa en la silla de pensar de la oposición, de donde no quieren salir. El presidente del partido, que continua inhabilitado, Oriol Junqueras, es el encargado de tomar las riendas ahora de una maltrecha Esquerra y se ha postulado como el hombre capaz de tomar el liderazgo con "corazón y fuerza" aunque ha comunicado en una misiva publicada en la página web del partido que pone su cargo a disposición de la militancia y de los "órganos soberanos que correspondan".

Sobre la intención de ERC de investir a Illa o entrar en el Govern, los republicanos siguen negando cualquier tentativa de formar un tripartido y Junqueras ha enfriado de nuevo este martes el apoyo al candidato socialista. "Desde hoy nos erigimos como la alternativa, firme y exigente, contra los que quieren que Cataluña sea la 17 comunidad autónoma a la que se le diga lo que tiene que hacer. Contra los que pensamos que Cataluña podrá ser gobernada desde Madrid y a merced de la voluntad de un presidente español. No, por aquí no pasaremos", ha expresado.

En la carta, el líder republicano que lideró el 1-O junto a Marta Rovira y Carles Puigdemont ha expresado que en esta nueva fase que inicia Cataluña ERC quiero abrirse a corrientes "más innovadoras y políticamente fértiles". "Desde el catalanismo más pragmático hasta el más idealista, que bajo la divisa republicana y progresista vincula a todos los demócratas, moderados y radicales. Somos la izquierda nacional transformadora, feminista y verde, de socialistas, liberales, sindicalistas, que abarca todas las sensibilidades del centro hacia la izquierda: desde democristianos y socialdemócratas hasta comunistas y libertarios", ha argumentado.

Ha seguido desarrollando que nada los va a paralizar tras los malos resultados de los comicios catalanes, donde han perdido 13 escaños. "Sabemos que el camino hacia la independencia es desde la democracia y la defensa de los derechos sociales, una vía amplia soberanista y de izquierdas que no admite deserciones a la primera de cambio. Nosotros no vendemos humo y no tenemos claro nuestro objetivo", ha expresado, "el referéndum y nos dejaremos la piel", ha recalcado.

El presidente del partido fue condenado a 13 años de cárcel, que resolvió mediante indulto tras cumplir condena y a una pena de inhabilitación hasta 2031. Junto con Marta Rovira está a la espera de la amnistía. Una circunstancia que le pesa pero que no le echa para atrás en un momento tan decisivo para ERC, con el vacío de poder que deja Aragonés. Junqueras ha hecho un repaso en su carta a los orígenes de ERC, de raíz asamblearia, de los ateneos y la lucha por la escuela pública y las libertades republicanas. Ha puesto en valor además el impulso que ha generado el partido tras haber "sufrido prisión y exilio".

Horizonte de las europeas

Conscientes de los efectos que puede tener el mal resultado en Cataluña, Junqueras ha lanzado un mensaje a la militancia para no desfallecer ante los comicios decisivos europeos en junio, donde Diana Riba es cabeza de lista republicana: "Desde 2017 hemos tenido que competir con otras fuerzas políticas con inferioridad de condiciones y en solitario. Hoy toca levantarnos con fuerza después de un ciclo electoral que no ha ido como esperábamos. Y el primer paso lo tenemos cerca: es necesario que estas próximas elecciones europeas la militancia dé un paso adelante, un paso de amor propio, un paso para defender el futuro de Cataluña en Europa. Para defender a nuestro campesinado, que se lo juega todo en Europa, para luchar contra el cambio climático y fortalecer a los pueblos dentro del marco federal europeo frente a unos estados nación caducos", ha expresado.

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