El Partido Popular ha empezado a analizar internamente qué hacer ante la prórroga del estado de alarma que se debatirá y votará el próximo miércoles. El 'sí' con reproches de las últimas prórrogas está más lejos que nunca, mientras que la abstención y el 'no' se abren paso como opciones más serias a día de hoy para el principal partido de la oposición, según explican fuentes populares a Vozpópuli.
En Génova quieren esperar a conocer el decreto que presenta Pedro Sánchez para esta nueva etapa de 'desescalada' por fases, pero no son optimistas viendo el comportamiento del presidente del Gobierno con los populares. "Estamos en una situación en la que se están tomando decisiones al margen del PP. Hemos votado por responsabilidad que 'sí' hasta ahora, pero es cierto que el plan de desconfinamiento tiene sus lagunas y no ha sido consensuado con las CCAA", observan las citadas fuentes.
El propio Pablo Casado indicó este jueves en Antena3 que el PP esperará a conocer el decreto del nuevo estado de alarma para decidir si lo secunda o no. Mientras llega ese momento de deshojar la margarita, Sánchez “todavía no ha contestado” a las peticiones que le planteó Casado para apoyar el decreto anterior: recuento de fallecidos real, test masivos para la población y suministro de equipos y apoyo a los sanitarios. De ahí que el plan de 'desescalada' sea, más bien, "un plan de descalabro" en palabras del líder del PP.
Tras el apoyo que puso en marcha el estado de alamar a mediados de marzo, un paso que hasta Vox avaló, se han producido tres prórrogas sucesivas en las que el PP no ha vacilado en el 'sí' por sentido de Estado. Pero ahora la situación ha cambiado. "La segunda vez que votamos sí, la gente lo entiende, la tercera está también bien, pero llega un momento en el que tenemos que analizar muy bien qué pretende Sánchez", subraya un dirigente próximo a Pablo Casado.
"Creemos que Sánchez quiere que otros le solucionen el problema. Está en su huida particular hacia adelante, no tiene plan específico, sino que es un conjunto de globos sondas y eso nos hace dudar", lamenta esta persona. En esos 'otros' se debe incluir a los partidos de la oposición, como Ciudadanos o el propio PP, que hasta ahora han apoyado con sus votos la vigencia del estado de alarma.
El PP cree que el próximo lunes, cuando se pase a la fase 1 en la terminología del Gobierno, se va a ver "un cabreo muy importante" con las medidas económicas que Moncloa ha anunciado. Así, se darán situaciones "absurdas" como que los hoteles de La Gomera o de Formentera podrán abrir sus puertas, pero se encontrarán sin clientes a los que alojar porque los viajes por barcos entre islas siguen prohibidos.
Por ello, en Génova quieren saber primero en qué condiciones decreta Sánchez la prórroga y luego ver qué ocurre con la reactivación parcial de la economía para entonces decidir el sentido de su voto. Por lo pronto, Casado expuso ayer en Twitter una serie de exigencias al Ejecutivo para tener el apoyo del PP.
Nueve condiciones
De las nueve medidas planteadas, las de materia socioeconómica contienen varias novedades. En primer lugar, se exige el pago "inmediato" de los 3,5 millones de prestaciones por ERTE que están pendientes desde hace medio mes.
También se reclama que el Gobierno facilite liquidez "suficiente" para que las empresas no se vean abocadas al cierre, así como el apoyo a tres reivindicaciones del PP en las últimas semanas: una paga extra a los sanitarios que luchan contra la covid-19, mantener el sueldo bruto a los sectores esenciales en esta crisis y eximir del impuesto de sucesiones a los herederos de fallecidos por la pandemia.
Casado, a la vez que presenta sus exigencias, mantenía su queja a Sánchez por no informarle "de la caótica desescalada" que ofrece a los españoles. "El duro confinamiento por no hacer test masivos, y la asfixia económica por no dar liquidez, no puede ser el subterfugio a la incapacidad", advirtió el líder del PP.