Pablo Casado cambia de estrategia de cara a las municipales y autonómicas. Se deshace de algunos dirigentes incómodos, provenientes del antiguo grupo de Sáenz de Santamaría, y pone al frente en Asturias y Cantabria a dos personas de su confianza, a dos nombres con mejor cartel electoral. Hasta ahora había respetado a los candidatos surgidos de las primarias, fueran o no próximos al nuevo equipo de Génova. Así ha sido en Castilla y León, Murcia, Rioja, Baleares, Canarias, Extremadura... Incluso en Andalucía, donde Juan Manuel Moreno aparecía como uno de los más fieles al sorayismo de todo el PP.
Las cosas han cambiado drásticamente, al menos en dos comunidades. Y no sin tensiones internas. La deportista y medalla de oro olímpica Ruth Beitia será la cabeza de cartel por Cantabria en tanto que la ingeniero Teresa Mallada lo será por Asturias. El primer caso apenas ha producido sorpresa. María José Fernández de Buruaga, la hasta ahora candidata, había llevado al PP cántabro a una situación de cisma interno muy perjudicial para los intereses de su formación. Enfrentada al gran 'pope' regional Ignacio Diego, al que se impuso en las primarias por tan sólo cuatro puntos, discutidos luego en los tribunales.
Buruaga era una fiel seguidora de la exvicepresidenta de Rajoy y apenas gozaba de simpatía alguna en el nuevo PP. Cantabria es una región en la que los populares ya vencieron en los últimos comicios. Miguel Ángel Revilla, aupado por los escaños de la izquierda, gobierna con enorme tranquilidad en una comunidad en la que Casado considera que pueden tener un mayor protagonismo.
Figura del deporte
Ruth Beitia milita en la formación conservadora desde hace años y Casado la incorporó a su ejecutiva tras su llegada a Génova este verano último. Es una gran figura del deporte, muy popular en el partido y con enorme reconocimiento social tanto en su región como en el resto de España. "Una apuesta con vocación ganadora", dicen en la dirección nacional.
En Asturias se incorpora Teresa Mallada como cabeza de lista en sustitución de Mercedes Fernández, una histórica que nunca ha logrado buenos resultados en una plaza donde tradicionalmente impera la izquierda. Mallada es ingeniera de minas, fue presidenta de Hunosa y también ha actuado en política como jefa de filas del PP en Aller, su municipio.
Casado aparta a Fernández, más conocida como 'Chelines', a quien sin embargo respeta su condición de presidenta del PP regional. Mallada, de acuerdo con las encuestas internas, tiene más tirón entre los votantes de Foro y de Ciudadanos, un factor que ha pesado a la hora de tomar una decisión muy difícil, según fuentes de Génova.
Mercedes Fernández también se pasó al bloque de Soraya Sáenz de Santamaría en las primarias, en las que ejerció un protagonismo muy intenso durante la campaña. El PP en Asturias apenas tiene relevancia, aunque ahora es posible que consiga remontar un poco el vuelo, en especial en Oviedo, donde se ha designado a Alfredo Canteli, como cabeza de lista al Ayuntamiento.
