Fuentes de la multinacional estadounidense han explicado que la fabricación del Crossland, que sustituye al Opel Meriva en las cadenas de montaje, comenzó antes de las vacaciones de Semana Santa para acumular un excedente suficiente para su distribución en el mercado a partir del próximo mes de junio.
El grupo ha decidido, sin embargo, aplazar la fecha anunciada para inaugurar de forma oficial la línea de montaje del Crossland, prevista inicialmente para hoy, y posponerla hasta finales de este mes o principios del siguiente a fin de dar al acto una "mayor relevancia".
General Motors prevé contar para ese acto con un alto responsable ejecutivo del grupo para conmemorar tanto la fabricación del nuevo modelo como la alianza suscrita entre ambas multinacionales.
El nuevo vehículo, según los datos dados a conocer hasta ahora, cuenta con todos los elementos de Opel a excepción del motor, desarrollado en conjunto con PSA y que también incluirá el futuro Aircross, de Citroën que saldrá en agosto pero que se prevé presentar mañana en Shangai.
Aunque a nivel exterior el coche muestra los rasgos de un Opel, el Crossland contará pues con un motor más vinculado a la tecnología del grupo PSA, que al margen de la alianza acordada se encuentra en negociaciones para la posible adquisición de Opel.
Las previsiones iniciales apuntan a que la planta de Figueruelas fabricará al año alrededor de 70.000 unidades del Crossland, lo que garantiza el futuro de las instalaciones y de todas las empresas auxiliares ubicadas en su entorno.
Fuentes sindicales han asegurado a Efe que con la fabricación del Crossland, la factoría aragonesa podrá demostrar todas sus potencialidades en sector.
Un hecho que consideran todavía más relevante ante la posible compra de Opel por parte de la multinacional francesa.
Mientras los equipos de negociadores de General Motors y PSA continúan con sus contactos en torno a la posible operación de compraventa, la alianza alcanzada ha favorecido que sea la planta de Figueruelas la que desarrolle los modelos frutos de este acuerdo.
El alto grado de especialización de la factoría aragonesa en el ensamblaje de vehículos se combina con el mayor nivel alcanzado por las plantas francesas en cuanto a la motorización.
Mientras tanto, la rentabilidad de los Opel Mokka en el mercado, que en 2019 pasará a fabricarse en Alemania, ha permitido que las empresas auxiliares del automóvil en Aragón trabajen a pleno rendimiento