Alrededor de un 70% de los hombres y mujeres que trabajan como empleados/as del hogar no cotizan a la Seguridad Social, según los datos de USO que utiliza la información de las altas de la Seguridad Social y las estimaciones sobre el número de hogares que tienen un trabajador de esta especialidad. El Instituto Nacional de Estadística (INE) considera que en España un 14,4% de los más de 17 millones de hogares cuenta con una trabajadora regular que presta algún tipo de servicio doméstico.
Según datos facilitados por USO la afiliación a la Seguridad Social en el mes de agosto de 2015 era en este sector de 424.428 personas. Sólo en la ciudad de Madrid hay 110.485 personas afiliadas. USO señala que en España hemos pasado de que “tener servicio” fuera un privilegio a que muchas mujeres cansadas de las dobles jornadas laborales, dentro y fuera de casa, "deleguen en otras mujeres, en su mayoría inmigrantes las tareas domésticas, o el cuidado hijos/as o personas dependientes".
Pero la crisis ha hecho que muchas mujeres hayan perdido su empleo y vuelto a casa, por lo que han despedido a miles de empleadas del hogar o han reducido sus jornadas laboral. El sindicato considera que la reforma del Régimen de Seguridad Social, ahora integrado en el régimen general como "sistema especial para empleados/as de hogar ", no ha resuelto los problemas. El hecho de no tener prestación por desempleo, o la regulación de las incapacidades temporales, no son un aliciente a la afiliación en la Seguridad Social. Creen que darse de alta supone una reducción de sus ingresos.
Se calcula que un total de 53 millones de personas trabajan en el servicio doméstico en el mundo, de las que el 83% son mujeres
La secretaría de Igualdad y Acción Social de USO-Madrid lleva tiempo participando en la plataforma Turín de entidades y personas que trabajan por la dignificación del sector. Intentan movilizar a la ciudadanía para instar al Gobierno a que ratifique el Convenio nº189 de la OIT que defiende los derechos básicos de estas trabajadoras. El Gobierno no lo quiere ratificar porque las empleadas en España no tienen derecho a paro y a la prevención de riesgos laborales. A final de verano este sindicato presentará una Guía de Prevención Laboral para Empleadas de Hogar (Editorial Aranzadi), que pretende resolver las dudas que tienen tanto empleadores como empleadas.
España no es una excepción en el trato a estas profesionales. "Los déficits en la cobertura de la Seguridad Social -explican- también afectan a los países industrializados como Italia con casi el 60% del personal o Francia con cerca del 30 por ciento del trabajo doméstico". Los países desarrollados, según señalan en USO, tienen en promedio una menor cantidad de horas semanales trabajadas: Suecia (31,5 horas, en 2007), España (25,9), Nueva Zelanda (21,8) y Noruega (14). Por el contrario, en los países en desarrollo la cantidad es más elevada, como en Namibia (62 horas, en 2007), Filipinas (53,3), Indonesia (51), Bolivia (47,2) y Brasil (36,8).
Se calcula que un total de 53 millones de personas trabajan en el servicio doméstico en el mundo, de las que el 83% son mujeres. USO señala que los países europeos han establecido la cobertura en la mayoría de ramas de la seguridad social, excepto para algunas contingencias como los riesgos del trabajo, que no están comprendidos en la cobertura en países como Irlanda. En España las prestaciones de desempleo están excluidas.