El ministro de Transportes alemán, Alexander Dobrindt, ha indicado este miércoles que de los nuevos 800.000 vehículos que Volkswagen ha admitido que presentan emisiones "irregulares" de CO2, unos 98.000 cuentan con motores de gasolina.
De esta forma, el escándalo en torno a las emisiones de gases contaminantes del fabricante de vehículos alemán deja de ser una cuestión de ciertos de motores diésel. "Hoy se nos ha comunicado que 98.000 de esos vehículos son de gasolina", ha señalado el ministro en un pleno del Bundestag (cámara baja) ante una interpelación parlamentaria.
Dobrindt ha considerado "inaceptable" el que una empresa haya tomado medidas para falsear los datos de emisiones de gases contaminantes y ha asegurado que Volkswagen debe asumir su "responsabilidad" en todos los frentes derivados de este escándalo.
"Volkswagen tiene claramente la responsabilidad y la obligación de reparar los daños a los clientes", ha afirmado. También explicó que su ministerio trabaja con el de Finanzas para resolver una de las derivadas de la información del martes de Volkswagen, cuando reconoció que, además de lo hasta ahora conocido, unos 800.000 vehículos del grupo tenían unos niveles de emisiones de C02 superiores a los teóricos.
En concreto, Dobrindt ha señalado que si los automóviles contaminan más de lo admitido, el impuesto de circulación también subiría, pero que están estudiando cómo hacer para que ese coste, que además sería retroactivo, no se exija a los conductores, sino a la empresa. Asimismo, ha aplaudido la iniciativa comunitaria para unos nuevos tests para vehículos y recalcó que Berlín aboga por la imposición de estándares internacionales de medición de gases.
llama a revisión a 92.000 vehiculos
Por otra parte, el fabricante alemán ha anunciaod la llamada a revisión en Estados Unidos de casi 92.000 vehículos debido a un fallo en el árbol de levas. Afecta concretamente a 91.867 vehículos de los modelos Golf, Jetta, Escarabajo y Passat de los años 2015 y 2016 con motores de gasolina de cuatro cilindros turboalimentados, de 1,8 y 2 litros.
Según el fabricante, la llamada a revisión tienen como fin reparar un fallo en el árbol de levas, ya que hay una pieza que puede quebrarse y ocasionar una pérdida de vacío en el sistema de frenos asistidos, afectando a la capacidad de frenada del vehículo.