El Gobierno de Mariano Rajoy situará la presión fiscal del IRPF por debajo de lo que la dejó el Gabinete de Zapatero. Sin embargo, el resto de figuras tributarias han subido muchísimo. Según los cálculos de la Agencia Tributaria, el conjunto de alzas aprobadas en el resto de figuras por el Ejecutivo popular suma los 16.273 millones de euros en 3 años y cinco meses de gobierno: 9.389 millones de euros por IVA, 2.377 millones por Sociedades, 2.209 millones por Impuestos Especiales y 2.298 millones por otros tributos.
El Gobierno cifra el recorte del IRPF en una media anual del 12,5% sumando la rebaja de enero de 2015 y la de julio del mismo ejercicio. De acuerdo con los números proporcionados por la Agencia Tributaria, la presión fiscal del Impuesto de la Renta, esto es lo que de verdad se paga sobre lo que se gana, ascendió en 2014 al 13%, la más alta de la historia después del recargo solidario que aprobó Montoro en diciembre de 2011 y que iba desde los 0,75 puntos para los tramos más bajos a los 7 puntos para los más altos.
Sin embargo, ‘ceteribus paribus’ se puede calcular con facilidad cuánto va a bajar la presión fiscal una vez esté completamente implementada la nueva tarifa del IRPF. Si la presión fiscal ahora ronda el 13% y según los guarismos del Gobierno va a disminuir lo que se contribuye un 12,5% de media, entonces la presión fiscal de esta figura descenderá en 1,6 puntos y se situará en el 11,4%, una ratio ligeramente por debajo del 11,9% que dejó el Ejecutivo de Zapatero en 2011. O dicho de otro modo, siempre según los cálculos dados por el Gobierno, la presión fiscal sobre las rentas quedará por debajo de la que existía cuando el PSOE abandonó la Moncloa.
No obstante, esa reducción de impuestos no será suficiente como para compensar el brutal incremento de la presión fiscal que han experimentado otros capítulos como el IVA, cuyo tipo medio real se ha disparado del 12,7% de Zapatero al 15,3% registrado en 2014. O los ingresos por Impuestos Especiales, que han aumentado desde el 23,2% de las bases con el anterior Ejecutivo al 25,1% de 2014. Y en menor medida el Impuesto de Sociedades, donde la recaudación ha alcanzado el 20,6% de las bases frente al 19,9% anotado en el último año de gobierno del PSOE. Si bien en este último tributo lo que realmente hizo Montoro fue suprimir algunos ardides que servían a las grandes empresas para reducir las bases imponibles y, por lo tanto, las cifras no son estrictamente comparables. Hasta el punto de que la subida de la presión fiscal en Sociedades probablemente sea bastante mayor si se cotejase en términos homogénos.
10 euros más al mes para un salario medio
Rajoy ha adelantado la rebaja fiscal del IRPF fijada para 2016. El presidente ha dado comienzo a la carrera electoral sacando la chequera. Y con ella va a devolver unos 10 euros más al mes a un trabajador con un salario de unos 23.000 euros brutos, que según el INE es el salario medio en España. De hecho, de acuerdo con los datos de la Agencia Tributaria, en la franja entre los 18.000 y 30.000 euros se encuentran aproximadamente unos 4,5 millones de trabajadores. Una vez entre en vigor, esta rebaja fiscal de unos 10 euros se sumará a los más de 20 euros al mes que ya brindó el Gobierno para este segmento de sueldos a comienzos de 2015.
El Ministerio de Hacienda argumenta que las rentas más bajas son las más beneficiadas porque porcentualmente perciben una rebaja mayor. Así, un contribuyente que ingrese 15.000 euros al año pagará en total 280 euros menos sobre una factura fiscal de unos 1.480 euros, esto es, un 18% menos. Por debajo de los 15.000 euros brutos, las nóminas se beneficiarán bastante poco del recorte tributario porque prácticamente ya no abonaban impuestos. Dentro de este grupo hay, según los datos de la Agencia Tributaria, más de 8 millones de declarantes.
El Gobierno argumenta que las rentas más bajas son las más beneficiadas porque porcentualmente obtienen una rebaja mayor
Por el contrario, las rentas altas disfrutarán de rebajas más sustanciales en términos nominales, oscilando entre los 50 y los 80 euros al mes. Por ejemplo, una renta de unos 60.000 euros tan sólo obtendrá un recorte de su recibo fiscal del entorno del 3%. Sin embargo, en términos absolutos la rebaja se antoja bastante mayor y alcanzará los 525 euros respecto a un desembolso anual de unos 16.400 euros.
Dividida en dos fases, la rebaja de impuestos de Cristóbal Montoro se aplica a todas las nóminas. El tipo mínimo del 24,75% en 2014 cae hasta al 19% en julio de 2015, si bien sólo grava hasta los 12.450 euros en lugar de hasta los 17.707 euros de 2014. O lo que es lo mismo, han cambiado los tramos de forma que las ganancias no son completamente lineales. No olvidemos que el Impuesto de la Renta funciona por tramos de ingresos, asignándole a cada corte un tipo cada vez mayor conforme crecen los tramos, de forma que los más ricos también tributan por los tipos más bajos en sus tramos inferiores de renta. Así, a partir de julio de 2015 un contribuyente que se embolse 60.000 euros brutos tributará al 19% por el tramo hasta 12.450 euros, al 24% por el tramo entre 12.450 y 22.200 euros, y así sucesivamente.
En concreto, las rentas obtenidas entre los 22.200 y los 33.000 euros se quedan dos puntos peor que en 2014. Pero las intermedias de 33.007 a 35.200 euros salen ganando con unos tipos sensiblemente más reducidos. En cambio, en la franja comprendida entre los 35.200 y los 53.407 permanecen igual que en 2014. Y a partir de ahí los gravámenes vuelven a descender mucho. El tipo máximo con el que se gravan las rentas conseguidas por encima de los 60.000 euros desciende del 52% de 2014 al 45% en julio de 2015. A continuación, les ofrecemos las tablas de las tarifas de 2011 y las que se emplearon entre 2012 y 2014:
Y las tarifas aprobadas por el Gabinete de Mariano Rajoy en enero de 2015 y en julio de 2015:
Según los expertos, el problema del IRPF radicaba en que tiene tipos muy altos para unos salarios que no lo son tanto en comparación con la media europea. Además, estas rentas fueron las que presuntamente más sufrieron el recargo solidario que aprobó Montoro en diciembre de 2011, cuando subió el IRPF desde los 0,75 puntos a las más bajas hasta los 7 puntos para las más altas al tiempo que añadía cuatro tramos más.
Si se compara enero de 2015 con julio de 2015, los tipos aplicables se recortan en todos los tramos de base imponible, aunque existe una gran diferencia en el trato que han recibido los sueldos más altos y los más bajos. La rebaja de tipos se centra sobre todo en las rentas más altas, para las que el Ejecutivo ha aprobado una rebaja de dos puntos, mientras que para las menores de 35.200 euros, es decir para la mayoría de rentas medias y bajas, la rebaja se reduce a un sólo punto.
La rebaja de impuestos de Montoro se aplica a todas las nóminas y supone una rebaja media en el conjunto de las dos fases del 12,5%
De esta forma, en las bases hasta los 12.450 euros anuales el tipo pasa del 20 al 19%. Desde esta cuantía y hasta los 20.200 euros, el gravamen disminuye del 25 al 24%. Y para rentas situadas entre los 20.200 y los 35.200 euros, el tipo baja del 31 al 30%. En cambio, se reduce dos puntos para las bases de 35.200 a 60.000 euros, las cuales tributarán al 37% por ciento en lugar del 39. Y respecto a las bases superiores a los 60.000 euros anuales, el porcentaje cae del 47 al 45%.
El coste de la medida de julio de 2015 asciende a los 1.500 millones de euros al año según reconoció el propio Rajoy. En el Plan de Estabilidad, el total de la rebaja del IRPF en dos años tiene un coste para las arcas de unos 4.800 millones. En lo que llevamos de año, la Agencia Tributaria calcula que ha perdido unos 1.000 millones netos de recaudación por la rebaja fiscal.
Por otra parte, los más beneficiados de la rebaja fiscal de Montoro son las familias numerosas a partir de 3 descendientes o con discapacitados a cargo. Para estos supuestos, ya existe desde enero de 2015 un impuesto negativo o subsidio de unos 100 euros al mes igual a la ayuda que ya disfrutaban las madres que se incorporan al trabajo con vástagos menores de 3 años.