El grupo BFA-Bankia obtuvo un beneficio atribuido de 894 millones hasta septiembre, que en términos netos asciende a 1.151 millones, un 77,7% más, gracias a la mejora de los ingresos, la reducción de gastos y las plusvalías, según la información remitida este viernes a la CNMV y recogida por la agencia Efe.
Sólo Bankia, la filial cotizada, logró un beneficio neto de 696 millones, un 53,9% más, que se eleva a 698 millones en el atribuido. El presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri, destaca en un comunicado que "la mejora de los ingresos trimestre a trimestre, la disminución de los gastos y la fuerte reducción de la morosidad, que permite empezar a rebajar las dotaciones a provisiones, sitúan a Bankia en el camino de cumplir el objetivo de conseguir un ROE -rentabilidad- del 10% en 2015".
La morosidad cayó del 14,65% del cierre del pasado año al 13,63%, mientras que la solvencia a cierre de septiembre se elevó al 12,44%, tras haber generado 5.472 millones en capital durante siete trimestres, periodo en el que ha visto mejorar su negocio.
"Mala imagen"
En la rueda de prensa para presentar los resultados, el consejero delegado de la entidad, José Sevilla, se ha referido al asunto de las tarjetas "opacas". Sevilla ha dicho que el escándalo no está afectando a la actividad comercial de Bankia, que mantiene sus objetivos a corto y largo plazo. "No nos va a cambiar ni a mejor ni a peor", ha dicho Sevilla, que aunque ha reconocido que la situación ha provocado "ruido", no ha afectado a la actividad comercial del grupo, aunque sí ha tenido impacto en la imagen del conjunto del sector financiero español.
Sevilla ha explicado que hay distinguir entre las entidades del pasado y las de ahora, y explicar que estas acciones, que no han sido generalizadas, corresponden a tiempos pasados que fueron corregidos hace tiempo, y "que no se deben volver a repetir". "Hay que hacer un esfuerzo por atender cada vez mejor a la sociedad, y esa es la mejor forma para contrarrestar cualquier mala imagen en el sector", ha asegurado Sevilla, que pregunta acerca de cómo puede afectar este escándalo a la venta de la entidad, ha manifestado que si no lo está teniendo en la actividad del grupo, mucho menos en los inversores.