CiU perdería las elecciones autonómicas catalanas si se celebrasen comicios este próximo domingo. Ésta es la sorprendente conclusión que arroja el barómetro de primavera del Gabinet d'Estudis Socials i Opinió Pública (GESOP) para ‘El Periódico’. Por primera vez en la historia (sin tener en cuenta el avance del PSC de Maragall en 1999), ERC (24,3%) conseguiría adelantar al partido de Artur Mas (21,4%) por tres puntos de ventaja, duplicando su actual representación en el Parlament hasta tener 40 escaños. La Federación nacionalista sufriría una inédita pérdida de votos y escaños seis meses después de las últimas elecciones y nueve desde el clamor independista de la Diada.
El partido de Oriol Junqueras se convertiría entonces en nueva piedra angular del nacionalismo. La encuesta, basada en 800 entrevistas realizadas entre el 28 y 31 de mayo, arroja asimismo un buen resultado para ICV-EUiA (12,2%), que quedaría en tablas con un PSC (12,2%) que difícilmente conservaría su tercera posición. Por último, el partido de Albert Rivera (Ciutadans) igualaría el resultado del Partido Popular de Cataluña (10,2%).
Tras este cambio de paradigma, que confirmaría "la rebelión de las grandes minorías", el bloque parlamentario que presentó la declaración de soberanía el pasado mes de enero se vería reforzado, llegando a superar los dos tercios del hemiciclo. De hecho, de las tres fuerzas con aspiraciones (ERC, PSC y PPC), sólo la opción independista suma votos.
No obstante, la formación de Junqueras sería la ganadora con menos fuerza de la historia en una cámara que se asemeja cada vez más a Italia o Grecia por su gran fragmentación. Y es que, la diferencia entre la primera y la segunda formación se reduciría de los 29 diputados actuales a únicamente 5 o 6.
Mas y su Govern suspenden por culpa de la crisis
Parece que la falta de confianza de los catalanes respecto a su futuro económico a corto plazo ha pasado factura a la valoración que se tiene de Artur Mas y de su Govern. Ocho de cada diez entrevistados considera que Cataluña ha empeorado en el último año y el 43% no ve motivos para confiar en una pronta recuperación. Por su parte, el 42% de los entrevistados considera 'mala o muy mala' la actuación del Gobierno de la Generalitat.
Este malestar se traduce en un suspenso para el presidente Mas, que por primera vez desde que empezaran los barómetros de GESOP en 2006, debe conformarse con una calificación de 4,8. El líder de CiU ocupa la cuarta posición, detrás de Oriol Junqueras (5,6), Joan Herrera (5,2) y David Fernández (5,0).