Hacienda ha embalsado las devoluciones de impuestos este año para cuadrar las cuentas. En los últimos dos meses, la Agencia Tributaria ha recortado hasta un 91% las devoluciones de impuestos como el de Sociedades y un 50% los de IVA o IRPF para engordar la caja del Estado y, con ello, disminuir el dato de déficit público. Según el informe de recaudación tributaria de diciembre que el ministerio publicó anoche por sorpresa, Hacienda ha devuelto a los contribuyentes 3.791 millones de euros menos que en 2011 con lo que el déficit mengua en casi 4 décimas. Sin ese colchón, el dato de déficit público habría sido del 7,1%.
La caída en las devoluciones ha sido especialmente acusada en los últimos dos meses del año, en los que la Agencia Tributaria apenas ha procedido a efectuar las devoluciones habituales. En noviembre, las devoluciones cayeron un 31% y en diciembre se han hundido un 62%.
Las devoluciones a empresas caen un 91% en diciembre
Por capítulos, la mengua ha sido especialmente significativa entre las empresas: las devoluciones por el Impuesto de Sociedades se han desplomado un 91,6%, es decir, Hacienda apenas ha devuelto 79 millones de euros frente a los 934 millones que devolvió en el mismo mes del año pasado. En el caso del Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF) las devoluciones a los contribuyentes se han reducido a la mitad: Hacienda apenas ha devuelto 248 millones frente a los 538 que retornó el pasado año. De igual modo, en el caso de las devoluciones por IVA, el Estado las ha recortado a la mitad y ha pagado 1.499 millones frente a los 3.472 millones que entregó el año pasado.
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La menor devolución resulta difícilmente compatible con la mayor recaudación en capítulos como el del IVA. Hacienda reconoce haber devuelto un 34,1% menos en el último trimestre pese a haber ingresado un 28,4% más.
La maniobra adelgaza el dato de déficit público
La decisión de recortar las devoluciones tiene un impacto inmediato en el dato del déficit. Los ingresos netos crecen 3.700 millones de forma automática en la parte que quienes elaboran las cuentas públicas denominan “recaudación cierta”. Con esa cifra extraordinaria en el capítulo de los ingresos, el déficit público mengua en 4 décimas. Sin ese colchón, el dato habría sido del 7,1% frente al 6,7% que declaró el Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
La Comisión Europea ya ha mostrado sus suspicacias y sus inspectores revisarán la contabilidad española en las próximas semanas. Sin embargo, Bruselas no suele tener acceso a los criterios que se fijan para realizar ciertas operaciones contables por lo que jamás han enmendado un dato de déficit público. Bajo el escrutinio de la Comisión quedarán también otros dos capítulos que pueden utilizarse para cuadrar el déficit: la llamada “recaudación incierta” y los pagos fraccionados de las empresas que este año ascienden rondan los 6.000 millones de euros. Esos pagos fraccionados son adelantos de las empresas al Estado para saldar sus cuentas en el mes de julio. El año pasado, el Ejecutivo socialista adelantó los pagos a cuenta en 2.000 millones y este año ha sido necesario devolver 1.668. Ahora, el Gobierno ha pedido, según las cuentas de Hacienda, 5.925 millones por adelantado de los que tendrá que devolver una parte en julio. También eso infla durante unos meses la caja.
Hacienda, que publicó el dato anoche sin la habitual rueda de prensa con la que se acompañan las cifras, no ha respondido a las llamadas de Vozpópuli.
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