El exministro socialista José Luis Ábalos, expulsado temporalmente de su partido, ya no se siente obligado a seguir la disciplina de voto que impone la dirección del grupo que dirige Patxi López. Así lo ha dejado claro en los últimos días. Pero con un Gobierno en minoría, que necesita hacer malabarismos parlamentarios para lograr una mayoría ajustada en todas las votaciones, cada voto cuenta. Y el suyo no es una excepción. Con una relación prácticamente rota con el que fuera su partido, desde que Ferraz le pidió el escaño y se fue al grupo mixto, el ya exportavoz de Sumar en el Congreso, Íñigo Errejón, ha sido una pieza clave para que Ábalos apoyase las iniciativas de la coalición. Actuando a modo de mediador.
El pasado mes de septiembre, sin ir más lejos, el voto de Ábalos se presumía vital para sacar adelante una propuesta sobre la regulación de los contratos del alquiler de vivienda por temporada y alquiler de habitaciones. Él mismo, en conversación con Vozpópuli, explicó que acabaría votando favorablemente a esta iniciativa "porque Errejón me lo pidió". El entonces portavoz de Sumar en el Congreso de los Diputados, dimitido este jueves tras varias acusaciones de presunta agresión sexual, le llamó minutos antes de la votación para que votara a favor. Pues Junts, que también había trasladado a sus socios que lo apoyarían, finalmente se desmarcaron.
Buena relación con Podemos y Sumar
Desde la moción de censura que llevó a Pedro Sánchez a la Moncloa, la relación de José Luis Ábalos con el espacio político que representan Podemos y Sumar ha sido muy fluida. Como secretario de Organización del PSOE, cargo del que dimitió en julio de 2021, fue el responsable de negociar los apoyos a esa moción de censura en el año 2018. Dos años más tarde, tras las elecciones generales de 2019, que se celebraron el 28 de abril y se repitieron el 10 de noviembre, fue quien selló las alianzas políticas con los morados para la conformación del primer Gobierno de coalición de la historia de España. A partir de ahí, durante la etapa que coincidieron en el gabinete ministerial, entabló muy buena relación con el resto de ministros que representaban a los socios minoritarios.
