La firma del contrato de venta de la empresa pública Aigües Ter Llobregat (ATLL) a un consorcio liderado por Acciona está prevista para el próximo 27 de diciembre, por lo que el dinero de la privatización servirá para poder cuadrar el presupuesto de 2012 y reducir el déficit de la Generalitat catalana.
Fuentes del departamento de Territorio y Sostenibilidad han confirmado a Efe que la rúbrica del contrato se llevará a cabo, en principio, el día 27, aunque no han descartado que se pueda retrasar en función de cómo se desarrolle la constitución del nuevo gobierno de la Generalitat.
La decisión del conseller en funciones de este departamento, Lluís Recoder, de no repetir en el cargo no tendría por qué afectar el proceso de privatización de ATLL, dado que el encargado de poner su firma en el contrato será el secretario general de la consellería, según las fuentes.
La venta de esta empresa pública es la mayor privatización prevista por la Generalitat, con la que se embolsará casi 300 millones de euros ahora y otros 700 millones a lo largo de los 50 años de concesión, en total mil millones de euros. Esta entrada de ingresos, de los que los 300 millones se harán efectivos en el momento de la rúbrica, servirá para reducir el déficit de la Generalitat de este año, que, en principio, no debería superar los 3.000 millones de euros, el 1,5 % del PIB.
ATLL suministra agua al área metropolitana de Barcelona y otras comarcas cercanas. Acciona, controlada por la familia Entrecanales, ganó el concurso de adjudicación de ATLL, por el que competía también Aigües de Barcelona (Agbar), que ha denunciado el proceso. En el consorcio que lidera Acciona se encuentra también el banco de inversión brasileño BTG Pactual, así como otras dos sociedades de inversión.