La diputada de Unión Progreso y Democracia, Irene Lozano, confesaba esta mañana en una entrevista radiofónica que no espera gran cosa de las comparecencias sobre el caso Bankia que hoy darán comienzo en el Congreso de los Diputados. "No tengo grandes Expectativas, y no quiero que la gente las tenga porque esto es un ejemplo de que el Partido Popular quiere hacer como que se investiga cuando en realidad no se hace nada", explicaba.
La diferencia radica en que lo que se verá en la cámara baja no es una comisión de investigación, como han pedido diversos grupos parlamentarios, sino comparecencias aisladas en las que todo está 'bastante controlado'.
Sí que tiene ciertas expectativas sobre el proceso abierto en la Audiencia Nacional, donde se investigarán las posibles responsabilidades penales. En palabras de Lozano, la justicia española tiene un problema de lentitud, aunque acaba llegando, además de su problema de politización. "Cuando llega a un ámbito no contaminado por la influencia del bipartidismo, como ocurre en la Audiencia Nacional y en el juzgado del juez Andreu, es un proceso complejísimo, muy largo, muy penoso, pero espero que de ahí pueda salir algo. Es importante que todos podamos tener un relato fidedigno de lo que pasó en Bankia, reflejo de lo que pasó en el resto de las cajas, y será un retrato de lo que supuso la nefasta toma de posesión de los partidos políticos en las entidades", declaraba.
Sobre la situación actual del país, la diputada considera que España da la imagen de 'un pollo sin cabeza', que no sabe muy bien dónde va porque falta un diagnóstico compartido de lo que ha pasado, de todos los aspectos de la crisis para poder aprender de los errores.
Politización de las cajas
Para UPyD es necesario el reconocimiento de la politización de las cajas y de su uso de forma clientelar, especialmente por parte de los dos grandes partidos que han participado en ello (PP y PSOE). "Si ellos no lo reconocen significa que no se ha hecho el diagnóstico, un diagnóstico que conlleve la asunción de responsabilidades. En las cajas había por un lado gente 'chupando del bote', y por otro gente que tenía dos rasgos: uno, que no entendía profesionalmente lo que estaba haciendo, y otro, que aunque lo entendieran no podían actual conforme a la ley por no ser independientes de los partidos", proclamaba Lozano.
También quería corroborar las palabras extraídas de un medio internacional, donde se decía que 'las cajas de ahorro habían funcionado como el cajero automático de un Gobierno autonómico sin control'. Respecto al este tema autonómico la diputada explicaba que también tenía que haber reconocimiento, que pedir un rescate también debería llevar aparejado una inmediata dimisión, porque solicitar ayuda económica evidenciaba que su propia gestión no había sido buena
Por último, en el caso concreto de Bankia, Lozano declaraba que su grupo había pedido la intervención judicial de la entidad por una razón, y es para que no se eliminen pruebas, evitar la opacidad, el encubrimiento y la impunidad. "Cuando Rodrigo Rato llega encubre todos los fallos de la gestión de Miguel Blesa. Después llega Goirigolzarri, elegido de forma anómala (le anuncia Rato), y forma un Consejo de Administración que no está defendiendo los intereses de los clientes, depositantes o trabajadores de la entidad sino los del anterior Consejo", añade.