El aceite de oliva es uno de los productos de la cesta de la compra que más se ha encarecido en los últimos años. A pesar de la bajada de su consumo debido a este motivo, lo cierto es que es todo un imprescindible de la dieta mediterránea, y está más que presente en las cocinas españolas. Así, todo el mundo conoce este común gesto: abrir el tapón de la botella, retirar la anilla de su interior y tirarla a la basura. Pero lo estás haciendo mal, porque este pequeño tapón tiene otra función.
Tras retirar la anilla, la boquilla de la botella queda demasiado ancha para verter ese fino y tan deseado chorro de aceite sobre ensaladas o cualquiera plato o elaboración. Ahora más que nunca, poder controlar la cantidad deseada de este preciado alimento es de lo más importante. El objetivo de esta anilla es este, y no otro: servir de dosificador sin tener que comprar utensilios extra.
La función que nadie conoce
Tras retirar la anilla, lo que nunca hay que hacer es tirarla a la basura. Un simple gesto es capaz de mejorar la experiencia, y permite verter de forma controlada el tan preciado 'oro líquido'. Lo único que hay que hacer es dar la vuelta a la anilla, esta vez con el tapón hacia arriba, y ajustarla a la boquilla de la botella.
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Tras muchos años haciéndolo mal, el gesto comienza a viralizarse en las redes sociales. Usuarios de las plataformas quedan atónitos ante la sencillez del gesto, que ya utilizan miles de personas en España. "Yo he hecho eso y sí funciona", "yo me lo ponía como anillo" o "a buenas horas me entero" son algunos de los comentarios que llenan las publicaciones y 'posts' de los usuarios.
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marqueslinchado
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¿Pero de dónde las sacáis?