La euforia en Francia por el exitoso desarrollo de los Juegos Olímpicos de París se ha visto empañada por un trágico suceso (sin envolver ahora en ello al río Sena). El cuerpo sin vida de una joven de 21 años, que había trabajado como voluntaria durante la celebración de la cita, fue encontrado en su apartamento de la capital francesa.
El hallazgo tuvo lugar en la madrugada del martes, apenas un día después de la ceremonia de clausura en la que París cedió el testigo a Los Ángeles para la próxima edición de 2028.
La joven fue reportada como desaparecida por su madre al finalizar la ceremonia. Cuando la policía acudió a su domicilio, encontró el cuerpo con signos evidentes de violencia, incluyendo un hematoma en el pómulo izquierdo y sangre en el cuello.
En el mismo lugar se hallaba su novio, en estado "semicomatoso" y sin capacidad de habla, lo que obligó a su traslado inmediato al hospital. Según fuentes cercanas al caso, el hombre habría intentado suicidarse ingiriendo medicamentos.
Las autoridades continúan investigando el caso mientras se espera el resultado de la autopsia que se le realizará a la víctima en los próximos días. Este lamentable hecho ha causado conmoción en París, marcando un trágico final a unos Juegos Olímpicos que habían sido motivo de orgullo para la nación gala.
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