Nuevo conflicto entre el catalanismo y los cuerpos de Policía estatales. Si este lunes conocíamos que el nuevo director de Promoción Cultural y Bibliotecas de la Generalitat, Xavier Fina, cargó en el pasado contra el supuesto "racismo" de la Guardia Civil, a los que llamó "hijos de Orriols", ahora el alcalde de Gerona, Lluc Salellas (CUP), ha enviado a la Policía Municipal de la localidad que ha sembrado indignación en el cuerpo. En ella, Salellas, demanda a los efectivos que acudan sin uniforme si participan en actos conmemorativos de la Guardia Civil o la Policía Nacional "para recibir distinciones o reconocimientos de título personal".
El alcalde de la formación antisistema recuerda en su misiva —que ha hecho llegar a toda la plantilla— que "años después" de la represión violenta ejercida durante el 1 de octubre de 2017", ningún responsable de ambos cuerpos ha pedido "disculpas oficiales ni se han asumido responsabilidades por aquellos hechos que conmocionaron a la sociedad gerundense". Siendo así, Salellas juzga conveniente que los agentes asistan a los actos prescindiendo del uniforme "con el fin de preservar el respeto y la confianza de la población gerundense hacia el cuerpo de la Policía Municipal".
Tanto el Sindicato Unificado de Policía de Cataluña (SUP) como la Asociación Unificada de Guardias Civiles en Cataluña han reprobado la carta, vinculándola al sesgo secesionista de Salellas y su rechazo a los símbolos del resto de España. Mientras, el líder del PP en el Ayuntamiento de Gerona, Jaume Veray, ha calificado de "vergüenza, humillación y coacción" a la Policía Municipal que se vete el uniforme en dichos actos "cuando precisamente los reconocimientos se los hacen como agentes de Policía".
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