España

Tres detenidos en Alicante por obligar a mujeres a prostituirse en un falso disco-pub

Las mujeres carecían de contrato laboral alguno y eran obligadas a prostituirse con jornadas de doce horas diarias durante seis días a la semana

  • Dos agentes de la Guardia Civil -

Tres personas han sido detenidas en Alfaz del Pi (Alicante) por presuntamente obligar a mujeres a prostituirse durante doce horas diarias en seis días a la semana en un local abierto al público que, bajo la apariencia de un disco pub, era en realidad un prostíbulo clandestino, según ha informado este miércoles la Policía Nacional.

Los arrestados, un hombre y dos mujeres, de nacionalidades portuguesa y rumana, de 36, 41 y 64 años, regentaban el local y están acusados de los delitos de prostitución, aunque también se les imputa el delito contra el derecho de los trabajadores, ya que las víctimas carecían de contrato laboral. Según la misma fuente, el negocio se publicitaba a través de una página web con fotos de ellas.

El varón, que ha pasado a disposición judicial, tenía el "control total" sobre las mujeres, a las que además restringía el poder hablar fuera del prostíbulo con cualquier persona, y se encargaba de recaudar el dinero que se obtenía por la prostitución, mientras que las dos arrestadas eran las que "vigilaban que las normas se cumplieran", según fuentes policiales.

La investigación se inició después de que la Unidad Adscrita de la Policía Nacional de la Comunitat Valenciana realizara una inspección del local y hallara evidencias de que se trataba de un prostíbulo clandestino, al haber habitaciones a modo de hostal que no encajaban con la licencia de actividad que contemplaba ser un disco pub.

Durante las indagaciones abiertas posteriormente, los agentes constataron que las mujeres carecían de contrato laboral alguno y eran obligadas a prostituirse con jornadas de doce horas diarias durante seis días a la semana.

Según la nota de prensa de la Policía Nacional, "la actividad primordial del negocio era la prostitución", que "se realizaba de manera clandestina, ya que la zona de las habitaciones se encontraba oculta tras una puertas secreta a la que solo se podía acceder mediante la apertura de un pulsador que estaba camuflado entre la barra".

Tras las detenciones se registró el establecimiento donde se intervinieron 11.750 euros en efectivo, medicamentos para la disfunción eréctil y diversa documentación relacionada con los delitos investigados, como anotaciones de nombres de mujeres y cantidades de dinero. 

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