Si todo es extrema derecha, nada es extrema derecha. En los últimos años, los partidos políticos de izquierda han abusado de un término que otrora sirvió para definir a regímenes fascistas como el de Mussolini. Hoy, incluso el vecino con bigote podría recibir la misma definición que Hitler por votar a un partido de derechas. Esta campaña electoral, el Gobierno de Pedro Sánchez ha apostado por azuzar el miedo a la "extrema derecha" y la "derecha extrema" para movilizar a sus votantes para el 23J. Una terminología que el Ministerio de Defensa desmonta en un reciente informe técnico sobre terrorismo internacional.
El Instituto Español de Estudios Estratégicos, perteneciente al Ministerio de Defensa, dedica en su último 'Cuaderno de estrategia' un capítulo al 'Terrorismo de Extrema Derecha' firmado por el especialista Román D. Ortiz, analista principal del Centro de Seguridad Internacional de la Universidad Francisco de Vitoria. En este capítulo, se subraya que el término extrema derecha es un concepto "considerablemente difuso que ha sido víctima de un enorme sobreuso".
Este especialista denuncia que el concepto ha sido utilizado como cajón de sastre para definir múltiples realidades: "en el término extrema derecha se han incluido realidades muy distintas, desde grupos reaccionarios racistas como el Ku Klux Klan en EEUU hasta organizaciones revolucionarias ultranacionalistas como el Ustaša – Hrvatski Revolucionarni Pokret (Movimiento Revolucionario Croata Ustacha)".
Este informe de Defensa hace un esfuerzo por delimitar la parcela teórica en la que sí puede situarse la extrema derecha más allá de discursos fáciles, una parcela de la que quedarían excluidos por definición PP y Vox, como veremos más adelante. Entre las características que ha de tener un grupo de extrema derecha se encuentra la defensa de un "gobierno autoritario con una aproximación 'dura' al mantenimiento de la ley y el orden, la defensa de la jerarquía social, la protección de valores tradicionales y el control de la oposición".
A esta característica hay que sumar que "este tipo de grupos mantienen postulados nacionalistas que identifican un cierto colectivo homogéneo en términos étnico y/o culturales como la base para la creación o el sostenimiento del Estado". En tercer lugar, "se añaden posiciones de corte xenófobo y racista en la medida en que la diversidad nacional y étnica se perciben como una amenaza al mantenimiento del mencionado colectivo nacional".
Otra conditio sine qua non es mantener una "inclinación populista y antistablishment que lleva a los movimientos de este credo ideológico a presentarse como adalides de los perdedores del statu quo y defensores del ciudadano común frente a las élites, un mensaje que permite a muchos movimientos de extrema derecha asumir atributos revolucionarios".
El elemento que excluye a PP y Vox de ser "extrema derecha"
Sin embargo, al margen de estas características, el informe de Defensa señala una fundamental que excluiría definitivamente a PP y Vox de la definición de extrema derecha: el rechazo a la democracia. "Los grupos de esta naturaleza están diametralmente opuestos a los valores e instituciones de la democracia liberal. Esto es clave porque marca una diferencia esencial con la derecha radical que, pese a compartir algunos de los postulados de la extrema derecha señalados más arriba, no mantienen postulados antidemocráticos", explica Ortiz.
Este especialista, avalado por el Ministerio de Defensa, señala que este punto es clave para diferenciar a un grupo o partido ultraconservador, como podría considerarse a Vox, de un partido de extrema derecha. La extrema derecha es una fórmula opuesta a la democracia que legitima el uso de la violencia para imponer su agenda ideológica. "De esta forma, el rechazo o no las reglas de juego democráticas se convierte en un parteaguas crítico en la definición de la extrema derecha: deja por fuera del objeto de este análisis a grupos que pueden defender postulados ultraconservadores, pero que mantienen su adhesión a las reglas de juego democráticas".
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No sé quién es el "genio" del estudio, pero al poner en el mismo cajón a PP y VOX, para enfrentar ese cajón al gobierno, está clara su intención de emborronar la derecha con la intención de... No, PP y VOX no son lo mismo, PP es un partido conservador, VOX es ultraderecha.