El congreso extraordinario de ERC en Barcelona, convocado para las 19:00 horas para decidir si los republicanos entran a formar parte del gobierno municipal del socialista Jaume Collboni, ha quedado suspendido al no contar el espacio reservado con el aforo suficiente para acoger a los militantes que han asistido. El partido ha decidido aplazar la consulta ante la afluencia inesperada de las bases que han acudido a la cita, entre los que estaban el histórico miembro municipal Ernest Maragall.

A las 19:45 horas, con largas colas todavía formadas ante el Orfeó Martinenc, miembros de la ejecutiva del partido en Barcelona han comunicado a los militantes que el congreso queda suspendido. La sala tiene un aforo máximo de unas 275 personas, mientras que los militantes del partido ascienden hasta aproximadamente un millar, según fuentes de la formación en Barcelona. 

Los republicanos han llegado a la cita sabedores de que la decisión puede generar inestabilidad al no haber consenso. Existe una evidente división entre partidarios y detractores del acuerdo, además de la confrontación de intereses entre la cúpula del partido, que lidera Marta Rovira, y el grupo de ERC en Barcelona.

Las negociaciones habían quedado suspendidas a la espera que de que se pasara el ciclo electoral de las elecciones catalanas y las europeas. Ahora las diferentes partes se han movido para marcar perfil a la hora de valorar todo lo que implicaría incorporar a los cinco concejales de ERC al equipo de Collboni, que elevaría su gobierno a 15.

El grupo municipal busca irrumpir en el Ejecutivo municipal para marcar terreno a los comunes y partir con mejor previsión en las próximas elecciones en Barcelona. Otras voces de la ejecutiva barcelonesa no lo tienen tan claro y gran parte de la militancia que acudía hoy a valorar el acuerdo se mostraba en contra por no ver coherencia a esta decisión cuando el partido se encuentra en plena reflexión interna y es clave para la investidura de Salvador Illa.

• Tags
• Barcelona
• Cataluña
• ERC