En los últimos años, venimos observando una tendencia preocupante: las olas de calor no solo son más intensas, sino que también se adelantan en el calendario. Lo que antes era un fenómeno propio del verano, ahora se presenta en meses como mayo e incluso abril. Este año no es una excepción, y España se enfrenta a una semana de contrastes meteorológicos, con temperaturas que oscilarán entre el calor sofocante y las lluvias torrenciales.
Un inicio de semana marcado por el calor
Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), la tónica general para el comienzo de la semana será la de temperaturas de pleno verano. De miércoles a viernes, los termómetros se dispararán en gran parte del país, superando en algunos casos los 40 grados centígrados.
Una bajada de temperatura y lluvia para el fin de semana
Sin embargo, este calor dará paso a un descenso térmico a partir del viernes. El fin de semana estará marcado por un ambiente notablemente más fresco de lo habitual para esta época del año, con temperaturas que podrían bajar hasta 10 grados en algunas zonas.
A este descenso de las temperaturas se sumará la llegada de lluvias, que se intensificarán a partir del viernes. Se prevén chubascos, algunos de ellos de fuerte intensidad y acompañados de tormenta, especialmente en el norte y centro peninsular.
Qué se espera el resto de semana:
— AEMET (@AEMET_Esp) June 5, 2024
?️ De miércoles a viernes temperaturas de pleno verano; el fin de semana las temperaturas bajarán de forma notable.
⛈️ De viernes a domingo episodio de lluvia en forma de chubascos, algunos de fuerte intensidad y acompañados de tormenta. pic.twitter.com/SPaa6HJA3m
Recomendaciones para hacer frente a los cambios bruscos de temperatura
Ante estos cambios bruscos de temperatura, la AEMET recomienda extremar la precaución y seguir las siguientes medidas:
- Beber abundante agua para evitar la deshidratación.
- Evitar la exposición prolongada al sol, especialmente durante las horas centrales del día.
- Usar ropa ligera y holgada.
- Prestar atención a los grupos de población más vulnerables, como ancianos y niños.
- Mantenerse informado sobre la evolución del tiempo a través de los canales oficiales.
Un verano cada vez más impredecible
La ola de calor de esta semana, junto con el descenso térmico y las lluvias del fin de semana, son un nuevo ejemplo de la cada vez mayor imprevisibilidad del tiempo. El cambio climático está intensificando los fenómenos meteorológicos extremos, lo que hace necesario que estemos preparados para afrontar situaciones de calor intenso, lluvias torrenciales e incluso sequías.
En definitiva, esta semana será un fiel reflejo de lo que nos espera en el futuro: un verano cada vez más caluroso, seco e impredecible. Es importante que tomemos conciencia de los riesgos que esto conlleva y adoptemos medidas para adaptarnos a esta nueva realidad.
