El Observatorio de Servicios Urbanos (OSUR) ha concluido que los ayuntamientos españoles con mayor dispersión del gasto público obtuvieron peores resultados electorales en los comicios municipales de 2019. Así lo ha explicado la plataforma en un informe en el que se analiza la evolución de los presupuestos locales entre enero de 2010 y mayo de 2019, justo antes de que muchas alcaldías cambiaran de color político. Para el análisis, se han estudiado 20 ciudades españolas en base a cifras oficiales.
Según el documento de OSUR, la tendencia de gasto de los ayuntamientos es a la baja. Así, explica que como en 2018 muchos gobiernos locales gastaron más, tuvieron que elaborar sus nuevos presupuestos de 2019 a la baja, siendo su desequilibrio y falta de rigor lo que en la mayoría de casos les ha pasado factura en las urnas.
El estudio de OSUR ha analizado cómo ha sido la media de gasto de todos los indicadores en los ayuntamientos que cambiaron de color a raíz de las elecciones de mayo de 2019 frente a los ayuntamientos que se mantuvieron en el gobierno municipal.
De esta manera, se comprueba que, en el último mandato de 2015 a 2019, el gasto en aquellos ayuntamientos donde hubo cambio en la alcaldía, se corresponde con aquellos en los que ese gasto ha variado de forma más pronunciada y desequilibrada, mientras que en los ayuntamientos que no cambió el gobierno se ha mantenido prácticamente estable durante todo el mandato.
El director general de OSUR, Lorenzo Dávila, ha destacado la tendencia a la baja en el gasto de los consistorios estudiados, tanto en los gobiernos con anterior experiencia de gobierno (y mayor rigor presupuestario) como los denominados del cambio. "Los excesos en 2018 de los gobiernos denominados del cambio les obligó a reducir un 23% en 2019 frente al 12% de los que mantuvieron un mayor rigor en sus cuentas", ha explicado.
"Es muy significativo que, en el último mandato (de 2015 a 2019), en aquellos ayuntamientos que no han cambiado tras las elecciones de mayo del año pasado, el gasto se ha mantenido significativamente más estable mientras que en los gobiernos que habían cambiado de color las variaciones del gasto fueron más pronunciadas y con mayores desequilibrios de un año a otro, lo que les ha podido llevar a estrellarse en las urnas", ha recalcado el director general de OSUR.
Bilbao, la ciudad con más gasto
La plataforma perteneciente a la Asociación por la Excelencia de los Servicios Públicos (AESP) ha pormenorizado por indicadores que en bienestar comunitario --partida que engloba el alcantarillado, abastecimiento de agua potable, gestión de residuos limpieza viaria, alumbrado público y servicios funerarios-- las mayores reducciones se produjeron en Zaragoza, con un 6,43%, y Valladolid, donde se reducen un 4,66%. Por contra, los gobiernos que más subieron el gasto en este indicador fueron los de Oviedo, con un 14%, y Valencia, ascendiendo un 9,57%.
Por ciudades, Bilbao fue la que más gastó en bienestar comunitario en 2019, alcanzando los 253,11 euros por habitante, y la ciudad que menos invirtió, con solo 95,47 euros, fue Valladolid.
Respecto a otros datos del año pasado, en la categoría de protección y mejora del medio ambiente, A Coruña fue la localidad que más redujo el gasto con 2,14 euros por habitante, mientras que fue el gobierno de Santa Cruz de Tenerife el que más incrementó el gasto en medio ambiente, con 6,3 euros más por habitante con respecto a 2018.
En términos globales, la ciudad que más gastó en protección y mejora del medio ambiente en 2019 fue Santa Cruz de Tenerife, la cual destinó 28,88 euros por habitante. Sin embargo, la ciudad que menos gastó en esta partida fue Granada, con solo 0,39 euros por habitante. En cuanto a la vivienda, que engloba temas como la promoción y gestión de vivienda de protección pública y conservación y rehabilitación de la edificación, Bilbao fue la ciudad que más lo recortó con un descenso del 50% respecto al 2018. En términos generales, la ciudad que más gastó en este indicador en 2019 fue las Palmas de Gran Canaria destinando 57,22 euros por habitante.
El análisis del gasto en materia de educación -que engloba administración general de educación, funcionamiento de centros docentes de preescolar y primaria y educación especial y servicios complementarios de educación-, concluye que fue Valencia el ayuntamiento que más lo redujo, bajando 7,38 euros respecto a 2018. Mientras tanto, Santa Cruz de Tenerife fue el consistorio que más lo ha aumentado, destinando 10,3 euros por habitante más que en 2018.
Respecto a la categoría de seguridad y orden público, Bilbao fue la ciudad que más gastó, con una asignación total de 148,03 euros por habitante, incrementado en 8,41 euros a 2018, mientras que la localidad que menos destinó fue Zaragoza, con solo 0,30 euros por habitante.
Instalaciones deportivas, la partida más recortada
La partida de información y promoción turística --que engloba protección y gestión del patrimonio histórico-artístico--, señala que fue Vigo la que más invirtió al asignar 16,25 euros por habitante, en contraste con Badalona, que fue la que menos asignó, con solo 1,24 euros por habitante.
Atendiendo al gasto en transporte público, Santa Cruz de Tenerife fue el municipio que más incrementó al destinar 14,04 euros más por habitante que en 2018. En términos globales, Bilbao fue la que más gastó por habitante, dedicándole 116,43 euros a dicha partida. En contra, Sabadell fue la ciudad que menos aportó, con solo 17,28 euros por ciudadano.
En promoción y fomento del deporte --que engloba instalaciones deportivas--, la localidad que más aumentó su gasto en deporte fue Cartagena, destinando 4,04 euros por habitante más. Por su parte, Madrid fue el gobierno municipal que más redujo esta partida asignando 3,88 euros menos por habitante que en 2018.
El ámbito en el que más recortaron los gobiernos que en su día fueron denominados del cambio (en las elecciones de 2015) en 2019, con un 45%, fue en instalaciones deportivas, seguido de protección y gestión del patrimonio histórico-artístico, que descendió un 33%, y recogida, gestión y tratamiento de residuos con un 10%. En contraposición, las partidas que experimentaron una subida de gasto más destacada dentro del año electoral fue vivienda, que subió un 57%, no obstante, en esta cifra no colabora el Ayuntamiento de Barcelona (que bajó un 2,3%), ni Madrid (con un 6% menos).
El análisis de los gobiernos con anterior experiencia de gobierno muestra que en solo 5 de los 21 indicadores se rebajó el gasto. En contraste, las mayores subidas se registraron en administración general de educación que subió un 19%, servicios complementarios de educación con un incremento de 17% y promoción y mejora del medio ambiente, con un 14% de gasto más.