Todos recordamos la emoción de ver como nuestro pasaporte se llenaba de sellos de colores tras cada viaje, esa pequeña colección de estampados era como un diario de nuestras aventuras. Sin embargo, esta costumbre tan arraigada está a punto de desaparecer en el espacio Schengen.
A partir del 10 de noviembre de 2024, el Sistema Europeo de Información y Autorización de Viajes (ETIAS) y el Sistema Automatizado de Entradas y Salidas (SES) entrarán en funcionamiento, marcando el fin de los sellos tradicionales en los pasaportes. Esta decisión, aunque polémica para muchos amantes de los viajes, busca mejorar la seguridad y agilizar los controles fronterizos.
¿Por qué desaparecen los sellos?
Según la Unión Europea, el antiguo sistema de sellado manual de pasaportes presentaba varias desventajas:
- Ineficiencia. El proceso de sellado era lento y requería una gran cantidad de mano de obra.
- Falta de precisión. Los datos registrados manualmente eran propensos a errores y dificultaban el seguimiento de los movimientos de los viajeros.
- Limitaciones en el control. No permitía detectar de forma sistemática a quienes superaban el límite de estancia permitido en el espacio Schengen.
La cuenta de Instagram @mochileandopr, un bloguero puertorriqueño ha compartido esta información con sus seguidores: "Ahora podrás entrar luego que escaneen tu cara, y tomen tus huellas dactilares, las cuales deberás validar en tu salida. Aplica a viajeros que tengan pasaportes biométricos. Si no tienes pasaporte biométrico tendrás que pasar por el método alterno con una persona oficial de inmigración".
¿Qué son el ETIAS y el SES?
La ETIAS es una autorización de viaje en línea similar a la ESTA de Estados Unidos. Los ciudadanos de países exentos de visado deberán solicitarla antes de viajar a la UE.
El SES es un sistema que registrará digitalmente la entrada y salida de los viajeros, incluyendo datos biométricos como huellas dactilares e imágenes faciales.
Beneficios del nuevo sistema
Con este cambio tendremos una mayor seguridad, los controles fronterizos serán más rigurosos y eficientes, lo que ayudará a prevenir la entrada de personas no autorizadas. Los trámites se agilizarán considerablemente, ya que los viajeros podrán pasar por los controles fronterizos de forma más rápida gracias a los sistemas automatizados. Habrá una mejor gestión de datos, la información sobre los movimientos de los viajeros será más precisa y accesible para las autoridades.
Un adiós agridulce
Aunque el nuevo sistema ofrece numerosas ventajas, muchos viajeros sienten nostalgia por los sellos de pasaporte. Estos pequeños estampados eran más que un simple recuerdo de viaje; representaban una conexión tangible con los lugares visitados.
Para los británicos, la desaparición de los sellos supone un alivio. Tras el Brexit, están obligados a sellar su pasaporte al entrar y salir del espacio Schengen para demostrar que cumplen con el límite de estancia de 90 días.