"No vamos a reservar entradas VIP para la cabalgata, sino que todos los niños y niñas accederán en igualdad de condiciones". El tuit y la frase tiene como autora a Rita Maestre, portavoz del Ayuntamiento de Madrid. La realidad es que habrá, como siempre, entradas VIP para los más poderosos o los cercanos al poder municipal.
El Gobierno municipal, ya en tiempos de Gallardón, pensó en retirar a las empresas del patrocinio de la noche de la ilusión de los niños. No lo hizo. Muchos pensaron que la llegada del gobierno de Manuela Carmena terminaría con la publicidad. Y no fue así.
Las empresas pagan y ven su nombre en las carrozas y en televisión. El Ayuntamiento les entrega entradas que estas sociedades distribuyen entre sus compromisos. Es decir como se ha hecho “toda la vida”. Los poderosos siguen consiguiendo entradas cómodas para sus niños.
El diario ‘La Razón’ ha afirmado que las empresas han llegado a pagar 30.000 euros por 215 entradas. La Corporación dice que son la ‘compensación’ por el patrocinio.
De la tarta de más de diez mil entradas otra parte va destinada al propio Ayuntamiento de Madrid. Sus funcionarios, las diversas áreas, sus concejales y los grupos políticos reciben también entradas VIP.
“Déjame tus entradas, que no tienes hijos”
Ayer en los wasaps de los diversos grupos políticos que manejan los concejales había peticiones varias: “Déjame tus entradas, que no tienes hijos”, se podía leer en uno de estos chats privados. Al parecer el Ayuntamiento ha entregado a cada edil cuatro invitaciones VIP.
En tiempos del PP la tribuna principal estaba repleta de compromisos de los populares. Las entradas eran un bien muy preciado y además de conocidos militantes nacionales, era fácil ver a los hijos de empresarios como Fernández Tapias, la vicepresidenta del Gobierno o Rafael de Marichalar.
El morbo principal este año será el vestido de los Reyes, que tras las críticas del año pasado, parece que serán más clásicos. No se conocen y están tan guardados como el de una novia antes de la boda.
Las ocas, malditas por stress
Los únicos perjudicados de la llegada del equipo Ahora Madrid hasta la fecha son las ocas de Miguelín. El nuevo Ayuntamiento cree que los animales sufrían estrés y prefirió retirarlas de la circulación.
No parece que tengan la misma opinión de los caballos de la policía municipal que acompañarán este año a la comitiva y que ya han sido anunciados en el programa oficial.
La Cabalgata de este año tiene como eje central “la curiosidad, concebida como un cuento infantil, para trasladar a todos los espectadores a un mundo lleno de ilusión y magia”.
“Se trata –según el Ayuntamiento- de un relato fantástico que llevará al público a estudiar la naturaleza, explorar el planeta, observar las estrellas y viajar al espacio con el mismo afán de conocimiento que impulsó a los Reyes Magos a embarcarse en su gran aventura, siguiendo una estrella hasta Belén”.
Se dedicará una parte de la cabalgata al lenguaje de signos “con el objetivo de hacer accesible la Cabalgata a las niñas, niños y personas sordas”. Una persona irá en cada carroza contando historias en lenguaje para los sordos.
En un estilo cercano al que trajo Alberto Ruiz-Gallardón, habrá siete espectáculos de compañías de arte de calle, dos de ellas provenientes de Francia y Holanda.
El desfile contará también con siete coreografías, tres a pie, otros tres a caballo y dos en bicicleta y la colaboración de cerca de 2.000 personas, gran parte de ellas en bici. Varias asociaciones han sido invitadas a participar en la fiesta.
